Una propuesta parecida, conocida como de «flexibilidad laboral», que eliminaba las indemnizaciones por años de servicio a los jóvenes entre 18 y 24 años, a cambio de capacitación, no prosperó hace dos años en su trámite legislativo, al no contar con el respaldo de los diputados de gobierno en la comisión de Trabajo.
La Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) informó que redacta los aspectos finales de un documento donde plantea reducir el salario mínimo que se paga a los jóvenes y sus indemnizaciones por años de servicio, a fin de incentivar la contratación de mano de obra.
Modificar las indemnizaciones por años de servicio o cambiar el sistema de sueldos para los más jóvenes, son materia de ley y, por tanto, requieren de su aprobación en el Congreso Nacional. Años atrás, una propuesta parecida no contó con respaldo político, como se indicará mas adelante.
Salario inferior al mínimo para combatir cesantía juvenil
La CPC propone un salario mínimo inferior al actual para los jóvenes entre 18 y 25 años, con el fin de incentivar su contratación y disminuir los niveles de desocupación de este grupo social.
También plantea registrar el número horas trabajadas anual y no mensualmente, introducir cambios al fuero maternal, incentivar el sistema de remuneración variable y ampliar las materias susceptibles de ser negociadas colectivamente.
Además piden reponer las 13 UTM de franquicia tributaria para las PYMES, eliminar el impuesto de timbres y estampillas y declarar el IVA en forma trimestral y no cada mes.
Proyecto detenido en la Cámara
La iniciativa del gobierno que fue «congelada» en la comisión de Trabajo, se titulaba «iniciativas de fomento del empleo y la productividad». Ingresó a trámite a la Cámara de Diputados el 28 de octubre de 2003, pero su análisis quedó paralizado, tras escuchar las primeras opiniones de sindicalistas y empresarios.
Arturo Martínez, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), tras asistir a la comisión de Trabajo de la Cámara, opinó que el texto legal «no gusta a nadie, ni a empresarios, ni trabajadores ni políticos, sólo al ministro (del Trabajo Ricardo) Solari».
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