VALLADOLID. Las organizaciones sindicales con representación en el Comité de Empresa de Renault España acordaron hoy convocar una manifestación para el próximo día 12 de febrero en París, fecha en la que el presidente del grupo, Carlos Goshn, tiene previsto presentar los resultados de ejercicio 2008, con el fin de expresar su rechazo al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afecta a un total de 10.311 trabajadores de sus diferentes plantas en territorio español.
La decisión fue adoptada a primera hora de hoy por los sindicatos, cuyos representantes, junto con delegados de otras empresas auxiliares de la misma, protagonizaron a las 11.00 horas una concentración ante las puertas de la Consejería de Economía de la Junta de Castilla y León, en Valladolid, en la que participaron más de doscientas personas.
La movilización, paralela a la que otros 300 compañeros desarrollaron en Sevilla ante la Subdelegación del Gobierno, estuvo presidida por distintas pancartas en las que se podía leer ‘Por el mantenimiento del tejido industrial en Castilla y León’ o ‘Garantizar con carga de trabajo el futuro de Renault Valladolid’, al tiempo que los participantes corearon consignas del tipo ‘trabajo sí, paro no’ y ‘si esto no se arregla, guerra, guerra guerra’, y todo ello bajo un fuerte dispositivo policial montado frente al inmueble de la Junta.
Entre los asistentes, el máximo responsable de CC.OO. en Renault España, Joaquín Arias, anunció el acuerdo alcanzado entre todas las organizaciones sindicales de trasladar el próximo día 12 de febrero su malestar a París, aprovechando que ese día el presidente de la multinacional gala, Carlos Goshn, presentará los resultados económicos de la compañía.
Arias, al igual que su homólogo de UGT, Pedro González, expresó su rechazo al ERE que, con el informe favorable de la Junta, fue aprobado por la Dirección General de Trabajo del Ministerio que dirige Celestino Corbacho y contempla la supresión de 50 jornadas de trabajo en Carrocería-Montaje de Valladolid y de 24 en la de Motores, también en la capital del Pisuerga, así como en las de Palencia y Sevilla.
MÁS CARGA DE TRABAJO Y VIABILIDAD FUTURA
"Podríamos estar de acuerdo con el ERE si tras él hubiera una garantía de futuro para Carrocería-Montaje. No se puede aprobar sin un proyecto industrial para esta factoría, pues de poco sirve tener ahora un ERE si detrás no hay nada y el futuro no es otro que el cierre", explicó Arias, quien insistió en que la principal reivindicación planteada pasa por "más carga de trabajo y garantías de viabilidad para Carrocería-Montaje".
En esta misma línea, el representante de UGT, Pedro González, se dirigió al consejero de Economía y Empleo de Castilla y León, Tomás Villanueva, para expresarle su disconformidad con el informe favorable al ERE emitido por su departamento "en ausencia de un plan industrial para las plantas de Valladolid y pese a los incumplimientos patentes de la Dirección de la empresa", de ahí que trasladara a la Administración regional y al Ministerio de Trabajo "toda la responsabilidad del futuro y del devenir de las plantas de la multinacional del rombo en España".
Ambos sindicalistas advirtieron de que a la decisión de convocar una manifestación en París para el mes de febrero seguirán otras medidas de protesta que habrán de ser consensuada entre las distintas organizaciones sindicales con representación en el Comité de Empresa de la multinacional.