MADRID. La empresa automovilística japonesa Nissan volvió a presentar este miércoles a los sindicatos un plan para despedir a 1.680 empleados en su planta de Barcelona con el fin aumentar la competitividad y poder optar a fabricar un nuevo modelo en 2010.
A mediados de octubre, Nissan anunció estos 1.680 despidos en España debido a la caída de la demanda de coches por la crisis económica, que sumió a España en la recesión, pero varias manifestaciones violentas de sus empleados le hicieron aplazar su plan.
El recorte de empleados está "enfocado a ser competitivo en 2010", fecha en que Nissan asignará nuevos productos a sus fábricas, explicó a AFP Alfredo Castaño, portavoz de la empresa.
La propuesta de este miércoles incluye "un plan de bajas voluntarias" y quienes se acojan a éste podrán seguir "un plan de formación y recolocación", además de una indemnización mayor que en anteriores planes de despidos, de entre 20.000 y 120.000 euros.
La dirección espera que los sindicatos acepten la propuesta, añadió Castaño.
Nissan emplea a 6.100 personas en España en sus plantas de Barcelona, donde ya se procedió a paros temporales para bajar la producción, Ávila y Valladolid.
Su decisión se une a otras tomadas por compañías de automóviles como Ford, Seat y Renault, presentes en España, donde la industria automovilística representa un 8,4% del PIB y el 80% de la producción se exporta.
La recesión en España hizo caer las ventas de coches en 2008 un 28,1% frente a 2007 y las últimas cifras sobre la producción indican que ésta bajó en noviembre casi un 40% frente al mismo mes del año anterior. En enero, las ventas bajaron un 41%.
La semana pasada, los fabricantes españoles vaticinaron que en 2009 la venta de coches puede bajar en España un 23% respecto a 2008 y la producción, un 21%.
Además estimaron que la crisis ha afectado a 100.000 empleados en la industria del automóvil, que han perdido su trabajo o han reducido su jornada laboral.