TOKIO. El fabricante de cámaras fotográficas Nikon recortará 1.000 empleos debido a los efectos de la crisis económica y para reducir costes por valor de 8.000 millones de yenes (cerca de 60 millones de euros), según informó hoy la compañía en un comunicado.
La empresa nipona, que reestructurará cuatro de sus filiales y las integrará en dos, recortará 800 empleos en su plantilla en Japón, que cuenta en la actualidad con 2.900 trabajadores, y otros 200 en sus departamentos internacionales, de marketing y servicios.
Nikon estima que la reestructuración causará cargas por valor de 4.000 millones de yenes (30 millones de euros) que se provisionarán en el presente ejercicio fiscal.
La compañía recuerda que viene aplicando desde el pasado año diversas medidas para contrarrestar el desfavorable entorno económico, como recorte de gastos de negocios, revisión del gasto de capital, pero añade que debido al empeoramiento de la crisis durante el segundo semestre de 2008 se ha deteriorado notablemente su negocio de equipamiento de precisión.