La industria fotográfica argentina perdería unos 25.000 puestos de trabajo en caso de aprobarse un nuevo impuesto al sector tecnológico que está siendo tratado en el Senado de la Nación.
Así lo advirtió la Cámara de la Industria Fotográfica Argentina (CIFA), que sostuvo que sigue "con suma preocupación la medida promovida por el Poder Ejecutivo que pretende proteger la industria electrónica de Tierra del Fuego".
El presidente de CIFA, José Russo, dijo que a esta situación se agrega el hecho de que "con el avance hacia la tecnología digital que ha hecho desaparecer el rollo, en los últimos dos años hemos perdido 30.000 puestos de empleo".
"Estamos convencidos que duplicando el parque actual de 5 millones de cámaras los recuperaríamos y volveríamos a los 50.000 empleos", remarcó y señaló: "para eso necesitamos que continúe el crecimiento de importación de equipos para salvar a la industria fotográfica, que depende de la post venta del dispositivo".
En un comunicado, el directivo reclamó que en el proyecto que está analizando el Senado se vuelva a recategorizar a las cámaras como un bien de capital, porque la iniciativa las tipifica como bienes suntuarios.
"El país no puede permitir que en momentos como este se aprueben normativas como esta, tenemos un mercado laboral ya afectado por la crisis internacional. Esto ya se refleja en el creciente índice de desempleo", concluyó Russo.
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