Los despidos vía regulación de empleo se dispararon durante los primeros siete meses del año en Galicia y multiplicaron por 3,6 la cifra del mismo periodo del ejercicio anterior. Según los últimos datos que maneja el Ministerio de Trabajo, 1.296 trabajadores de la comunidad gallega perdieron su empleo hasta el pasado mes de julio por este procedimiento, mientras que hasta julio del año pasado la cifra había sido de 352 personas. De esos 1.296, 1.013 (el 78% del total) son de Pontevedra; 200 de A Coruña, 75 de Ourense y 8 de Lugo. En la provincia de Pontevedra, el incremento de despidos con respecto a los siete primeros meses de 2008 fue de un 541%; en Ourense, del 257%; en Lugo, del 33% y en A Coruña, del 19%.
La recesión económica ha golpeado con fuerza al mercado laboral español, incluido el gallego, y durante el pasado mes de septiembre la comunidad gallega volvió a superar la barrera de los 200.000 desempleados.
Esta semana, el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, vaticinó que el desempleo en España seguirá aumentando en octubre, aunque no quiso dar cifras porque, dijo, "se ha demostrado que las cosas pueden cambiar de un mes a otro".
El titular de Trabajo aseguró que entre 2001 y 2007, periodo de crecimiento económico, el paro aumentó en octubre en una media de 41.000 personas, por lo que este año "no va a ser diferente". No obstante, mostró su confianza en que las cifras de paro de este octubre sean inferiores a las registradas un año antes, cuando subió en 192.658 personas.
Despidos
Sólo durante el mes de junio, según el boletín de estadísticas laborales del Ministerio de Trabajo, 406 gallegos fueron despedidos por la vía de regulación de empleo. Es la cifra más alta de extinciones de contrato desde que comenzaron las dificultades económicas. La segunda mayor se dio el pasado mes de febrero con 338 despidos, y la tercera, en julio, con 280 afectados.
Por provincias, el mayor pico en A Coruña fue de 55 en el mes de febrero; en Pontevedra, de 384 en junio; en Lugo, de 3 en enero, y en Ourense, de 43 en mayo.
Los sindicatos han acusado a muchos empresarios de aprovechar el mecanismo de la regulación de empleo para agilizar sus plantillas.
Durante todo 2008, los despidos mediante las regulaciones de empleo en la comunidad gallega llegaron a 913 personas. En 2007 fueron 779.
Los 1.296 gallegos despedidos vía regulación de empleo hasta julio suponen un incremento del 268% con respecto al mismo periodo del año anterior. Sólo Murcia, con un aumento del 613%, y Castilla La Mancha, con un 317%, superan la tasa gallega.
En el extremo opuesto destaca el escaso crecimiento de Canarias (13%) y Castilla y León (16%). En cifras totales, Cataluña, con 11.088 despidos; Comunidad Valenciana, con 8.583, y Madrid, con 5.923, lideran la clasificación.
La crudeza de la crisis ha forzado a 833 empresas de la comunidad gallega a recurrir a los expedientes de regulación de empleo durante los primeros siete meses del año. Una cifra que duplica las alcanzadas durante 2008, ya que en las mismas fechas apenas se había superado las 400.
Según señalan los expertos, los sectores que más están tirando de la regulación de empleo para hacer frente a la caída de pedidos en la comunidad pertenecen al sector industria, al inmobiliario y al de servicios.
La presentación de expedientes de regulación de empleo acumula un constante crecimiento en la comunidad gallega desde el pasado mes de diciembre. Ese mes pasó del centenar, algo que no había ocurrido durante los once anteriores.
El pico más alto se alcanzó durante el mes de enero, con 184 expedientes tramitados. En febrero y marzo bajaron del centenar (84 y 75, respectivamente), mientras que a partir de junio han vuelto a incrementarse: 117 en mayo; 119 en junio y 130 en julio.
Galicia sale, según las estadísticas, a una media de 119 expedientes de regulación por mes en lo que va de año. Lo más común, según explican los expertos, es que se den regulaciones de forma temporal. Es decir, que los empleados salen de su compañía durante unos meses, para, una vez cumplido el período de tiempo establecido, volver a su trabajo habitual.
Según las últimas cifras del Ministerio de Trabajo, un total de 16.260 gallegos se han visto en esta situación hasta el pasado mes de julio, el doble que en el mismo periodo del año pasado.