Puerto Rico mantiene un elevado índice de desempleo provocado por una profunda crisis cuya salida no se vislumbra a corto plazo, según las estimaciones de la Asociación de Economistas de la isla caribeña.
El desempleo para el pasado mes de junio se situó en el 16,6 por ciento, una mínima reducción de 0,2 puntos en relación a mayo, cifra irrelevante para la presidenta de la Asociación de Economistas de Puerto Rico, Martha Quiñones.
Las cifras difundidas por el Departamento del Trabajo y Recursos Humanos muestran que las personas desempleadas en Puerto Rico el pasado junio alcanzaban las 217.000, un total de 2.000 menos que en mayo.
Quiñones señaló hoy a Efe que una de las razones que puede explicar esa leve mejoría en el desempleo es el constante flujo migratorio de personas que abandona Puerto Rico y que, de esa forma, dejan de formar parte del colectivo que busca ofertas de trabajo en la isla caribeña.
"Muchas personas se están yendo del país", indicó Quiñones, al comentar los últimos datos difundidos por el Departamento del Trabajo, según los cuales en junio había en Puerto Rico en activo 1.085.000 individuos, 4.000 más que el pasado mayo.
Quiñones apuntó también para explicar el ligero descenso de desempleados que algunos de los miles de funcionarios públicos despedidos hace meses por el Gobierno de Luis Fortuño dejaron ya de recibir ayudas estatales, lo que les obligó a aceptar algún tipo de puesto de trabajo.
"La situación está estancada y no hay cambios", subrayó Quiñones sobre la economía del país caribeño, que sufre ya por cuarto año consecutivo una profunda crisis cuyas principales consecuencias se han dejado sentir en el aumento del desempleo que ha empujado a muchos puertorriqueños fuera de sus fronteras.
"Existen contradicciones en cómo se llevan a cabo las políticas económicas", dijo en relación al Ejecutivo Quiñones, para quien como apuntó en tono metafórico "no se ve la luz al final del túnel".
Sostuvo que la economía "no está mejorando", como queda demostrado con el altísimo desempleo que reflejaron los últimos datos del Departamento de Trabajo.
El secretario del Departamento del Trabajo y Recursos Humanos, Miguel Romero, señaló recientemente que a corto plazo sólo es previsible una ligera disminución del desempleo en Puerto Rico.
Fortuño ha enviado señales de la supuesta mejoría experimentada por la economía de la isla caribeña durante los últimos meses, aunque sin atreverse a declarar el fin de la crisis.
El gobernador recordó el pasado junio que el Índice de Actividad Económica había creció en mayo, por cuarto mes consecutivo, lo que significa, según su interpretación, que Puerto Rico daba sus primeras señales de recuperación.
Fortuño atribuyó entonces parte de la mejoría económica a las Alianzas Público Privadas (APP) que promueve el Gobierno y que supondrán la entrada de la iniciativa privada en compañías públicas a través de concesiones.
Los proyectos más destacados de APP incluyen la construcción de una planta de gas natural en el sur de la isla, el plan de mejoras en el aeropuerto de San Juan y la puesta en marcha del "Puerto de las Américas" de Ponce, que podría generar hasta 5.000 nuevos empleos.
Puerto Rico atraviesa por su cuarto año consecutivo de crisis y sufre un déficit presupuestario cercano a los 3.200 millones de dólares.
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