El desempleo volvió a desnudar la fragilidad del optimismo del gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero sobre el futuro inmediato de la economía al alcanzar su registro más alto en los últimos 13 años: 22,09 por ciento.
El índice, que se traduce en 4.645.500 personas en edad de trabajar que hoy se encuentran excluidas del mercado laboral en España, creció un 0,4% respecto de la última medición oficial, realizada al finalizar el primer trimestre del año, por lo que en junio la cantidad de desocupados aumentó en 32.800 personas.
De esta manera, España pasó a doblar el promedio de desocupación de los 27 países de la Unión Europea (UE), estimado en un 10%, y sólo Letonia alcanza una tasa similar a la española.
A pesar de que el gobierno socialista de Zapatero insistió en las últimas semanas en que la situación del país ya no era "tan mala" como al comienzo de la crisis, el mandatario reconoció que la tasa de desempleo es "inasumiblemente alta".