El Sindicato de Camioneros cumplió otra jornada de bloqueo a las plantas de la siderúrgica Siderar, propiedad del Grupo Techint, en reclamo por salarios y la incorporación efectiva de trabajadores, y el sector del transporte ya analiza un paro nacional en apoyo.
Si las medidas de fuerza no cesan, el sector industrial sentirá el desabastecimiento ya que en los seis días de protesta la siderúrgica más importante del país no pudo sacar al mercado unas 48 mil toneladas de acero.
La tensión sigue instalada y toma fuerza con el paso de las horas en las plantas que la firma de la familia Rocca tiene en las localidades bonaerenses de San Nicolás, La Plata, Haedo, Florencio Varela y Canning, donde los manifestantes no dejan ingresar camiones.
El sindicato que dirige Pablo Moyano -hijo del titular de la CGT, Hugo Moyano-, reclama a Techint mejoras salariales para los trabajadores y la incorporación como efectivos de decenas de operarios contratados y tercerizados, lo cual es rechazado por la firma.
Los manifestantes de Camioneros tomaron cinco plantas el martes pasado y permanecen en los portones de ingreso a las mismas, bloqueando el paso para que ningún camión pueda ingresar con insumos o salir con producción.
Gremios del transporte aéreo, marítimo y terrestre se declararon en estado de alerta y analizan convocar a un paro general en apoyo al sindicato de camioneros que mantiene bloqueadas las plantas siderúrgicas del grupo Techint.
Esa declaración de los gremios del transporte fue resuelta en una reunión de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) que dirige Omar Viviani, en respaldo al reclamo del sindicato de choferes de camiones de Pablo Moyano.
Según dijeron desde la CATT a la prensa, de no resolverse el conflicto el sector podría encarar un paro nacional de transporte el miércoles 25, lo cual afectará no sólo a cientos de empresas sino también a miles de pasajeros.
En principio, los camioneros se movilizarán en las primeras horas de este lunes a las oficinas céntricas de la empresa, ubicadas en el barrio de Retiro, y prometen realizar un acampe hasta que la situación se modifique.
Por su parte, la compañía Siderar -que es la principal siderúrgica del país- anticipó en un comunicado de prensa que de continuar esta medida empezaría a peligrar su producción, por lo que el sector caería en un desabastecimiento.
Incluso fuentes del sector de la construcción y la industria automotriz advirtieron a un matutino que, si las medidas de fuerza no se frenan, el martes se agotaría el stock para la construcción y el miércoles para las automotrices.
En situaciones normales, Siderar despacha unas 8 mil toneladas de acero por día al mercado, en seis días no sacó unas 48 mil toneladas, y la Asociación Empresaria Argentina (AEA) expresó su preocupación.