Para que un programa de seguridad muestre todo su potencial tiene que formar parte de un plan gradual, mientras que su puesta en marcha será el componente más importante d ela gestión. Es necesario plasmar este programa progresivo en un documento donde se exponen instrucciones precisas acerca del calendario de cada actividad, para que los elementos sean conocidos por todo el personal.
Muchos autores coinciden en afirmar que el elemento más significativo de un programa de seguridad es la aprobación constante y abierta de las máximas autoridades de la organización. Para ello, la responsabilidad de los cargos gerenciales será determinante para el éxito del programa ya que, entre otras cuestiones, son los encargados de la transmisión de los conceptos a los supervisores, para que la información sobre los servicios preventivos sea de público conocimiento dentro de la empresa.
Así, los componentes esenciales del programa son aquellos que permiten desarrollar habilidades y conceptos puntuales en materia de seguridad para luego aplicar los métodos de medición más acordes. Este último aspecto es de vital importancia debido a que una auditoria del programa de seguridad facilitará el acceso a una evaluación constante de su funcionamiento. Por tal motivo, se estima que un plan es exitoso mientras se realice un control de manera anual, para que se mantenga en el tiempo.
No obstante, en cualquier empresa se debe apostar por una mejora continua, adaptándose a las transformaciones que ocurriesen en aquel contexto. Por eso resulta fundamental que los directivos realicen anualmente una evaluación de los costes y beneficios para el periodo siguiente. De esta forma, los propósitos del plan se ven siempre ajustados, a su vez, a las metas corporativas.
Para su funcionamiento, es crucial que la comunicación y la participación de los distintos trabajadores y jerarquías no fallen porque este feedback permitirá que todos acepten los objetivos y procedimientos del programa.
Si las condiciones de seguridad son óptimas, la empresa mejorará la productividad y el trabajador conservará la estabilidad, disminuyendo sus riesgos. Como consecuencia, en la empresa habrá disminución de ausentismo y el personal se sentirá más motivado.
Para trazar los fundamentos de un plan de seguridad primero hay que tener en cuenta el método propuesto en detalle, la evaluación de los efectos del programa sobre el funcionamiento de la empresa, sin olvidar de los costes de la ejecución del plan y sus beneficios futuros. Lo importantes es que se detecten los peligros para luego eliminarlos.
Los riesgos en el trabajo
El hecho de estar expuesto en un puesto laboral durante largas horas aumenta el riesgo de contraer lesiones, aunque poca carga horaria basta para que un empleado sufra un accidente o enfermedad. Sin embargo, lo cierto es que muchas empresas no protegen como es debido al trabajador.
En ciertos países los costes de indemnización por accidentes laborales se estiman conforme al perjuicio sufrido por el empleado.
Si bien el empleador debe proteger a los trabajadores y ayudar a prevenir cualquier tipo de siniestro, en realidad esto se logra principalmente si la empresa cuenta con una organización eficiente. Los peligros en el ambiente de trabajo son una realidad.
Para evitarlos, las empresas tienen que detectar los factores que causan ciertas enfermedades laborales así como las situaciones de riesgo para evitar que sucedan.
La competitividad también es una realidad. Es el concepto clave para entender por qué es necesario promover programas de prevención de riesgos ya que lo importante para las industrias es lograr más productividad que los competidores. Y esto se logra tomando medidas para reducir los riesgos de accidentes dentro del ámbito laboral y tener las condiciones adecuadas para un ambiente seguro de trabajo. Entonces, el empleador con un plan eficaz puede evaluar las pérdidas, disminuyendo la inseguridad en el trabajo y así mermar los riesgos de situaciones peligrosas.
Vale destacar que en el caso de que el trabajador atravesara por una enfermedad o accidente, es su derecho conservar el trabajo el tiempo dispuesto por la ley.
Medidas preventivas
Para prevenir males futuros, las empresas realizan estudios para conocer el ambiente laboral, identificando los agentes de riesgo, que pueden ser tanto físicos, químicos como psicosociales, mientras que cada caso tiene una medida específica de control.
Así, las autoridades de una organización tienen que vigilar que las condiciones de las instalaciones sean las apropiadas.
A través del programa de seguridad, los directivos proponen las normas pertinentes para el cuidado de los empleados, por ejemplo, en lo referente al uso de maquinarias. Por ello, las empresas deberán tener en cuenta tanto las condiciones generales de trabajo, así como los equipos de protección en determinados trabajos, entre otras.
Por su parte, el empleador deberá salvaguardar a los empleados ya que, por ejemplo, los químicos en el lugar de empleo no deben exceder el límite permitido. Si sobrepasa tendrán que cambiar de lugar físico. Por eso una adecuada capacitación del personal resulta necesaria para mitigar la incidencia de accidentes porque tienen que estar preparados y entrenados para lo que puede acontecer.
Por eso, desde la otra vereda se encuentra la responsabilidad en cuanto al comportamiento del empleado. Este deberá manifestar a su superior en el momento que, por ejemplo, padezca una enfermedad, para evitar daños mayores.
Lo importante: trabajar en equipo
Para que se ponga en práctica el programa de seguridad, la organización deberá contar con un equipo responsable de ejecutarlo. La intención es lograr una mayor colaboración y así detectar de manera anticipada las falencias del programa desde el comienzo. Es por ello que de esta participación en equipo surge un documento donde se expresan las expectativas de la empresa acerca del programa y los elementos que lo componen.
Desde la dirección se debe fomentar campañas en pos del cuidado de la salud de los empleados. Por su parte, el supervisor deberá lograr que los objetivos del programa fijados por las autoridades se cumplan. Los supervisores deberán garantizar que las actividades de los trabajadores se realicen en condiciones seguras. Asimismo, deberán capacitar a los trabajadores para que conozcan los peligros del trabajo y así evitar accidentes laborales.
Por último, quienes tienen que estar atentos son los que ocupan cargos operativos y de personal, ya que son los encargados en la gestión de riesgos.
Programas de seguridad: Subsistemas de gestión
Así, el programa se basa en dos cuestiones. Por un lado, disminuir los riesgos de los empleados en el trabajo. Por otro, el cuidado del medio ambiente en relación con las normas de higiene de la empresa. Por estas cuestiones se considera que estos programas de seguridad son subsistemas de gestión, con el fin de conocer las causas de los riesgos en un trabajo y prevenirlos, para preservar la salud de los trabajadores.
Por eso, la seguridad es responsabilidad de todos los que integran un equipo laboral.
En definitiva, si la empresa logra aplicar un programa de seguridad conveniente, logrará que el trabajador cumpla su labor en mejores condiciones y, a menor riesgo, mayor productividad.