BUENOS AIRES. La polémica por las cuestionadas cifras de la inflación en Argentina aumentó este miércoles después de que el Gobierno amenazara con imponer sanciones económicas a las consultoras privadas que difundan informes con "inexactitudes o errores que induzcan a engaño".
El Gobierno exigió hace dos semanas a las consultoras que le remitieran explicaciones sobre cómo analizan la variación de los precios al consumidor, ya que sus mediciones casi triplican el dato oficial de la inflación, y este martes advirtió que podrían ser sancionadas por infringir la ley de lealtad comercial.
Las firmas podrían ser multadas por no respetar un artículo de la normativa que "prohíbe manifestar inexactitudes y ocultamientos que inducen a error, engaño o confusión respecto de determinadas cuestiones comerciales produciendo tanto a la población como a los comerciantes incertidumbres respecto de los precios", informaron fuentes del Ministerio de Economía a la agencia estatal Télam.
"Es una embestida de carácter político. El Gobierno está en una avanzada y esta vez nos abarca a nosotros. Lo que quiere es que no informemos más. Hay un propósito de que haya un solo relato", afirmó hoy en declaraciones radiales el exviceministro de Economía Jorge Todesca, titular de la consultora Finsoport.
El exfuncionario aseguró que van a "buscar los mecanismos legales para avalar" su actividad y adelantó que si el Gobierno les sanciona acudirán a la Justicia.
"Tengo 19 año como consultor y es la primera vez que nos toca vivir esta cuestión", aseguró el economista Carlos Melconian en otra entrevista radial.
El Gobierno rechaza las cifras de consultoras independientes y tanto la presidenta Cristina Fernández como el ministro de Economía Amado Boudou evitan utilizar el término inflación y hablan de "distorsión" y "dispersión" de los precios y de un "aprovechamiento" de la situación por parte de los empresarios.
Las mediciones de las consultoras privadas han cobrado relevancia desde que en enero de 2007 el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) introdujo cambios metodológicos en el índice oficial de precios al consumidor.
En cuatro años de intervención en el organismo de estadística, la inflación ha crecido un 39 por ciento según estimaciones oficiales, que consultoras privadas elevan al 120 por ciento.
El año pasado, según el Indec, la inflación fue del 10,9 por ciento, mientras que para las consultoras privadas los precios crecieron en torno al 25 por ciento.
Pese a la decisión del Gobierno de rechazar públicamente los cálculos privados, los sindicatos oficialistas se guían por las estimaciones de las consultoras para fijar sus demandas salariales.
El Gobierno argentino ha solicitado la asistencia técnica del Fondo Monetario Internacional para confeccionar un nuevo índice de precios.
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