La gestión de la comunicación interna en la empresa tiene aspectos relevantes que se articulan entre sí. La función de la comunicación interna es por un lado, transmitir a los empleados la información de la empresa y por otro recoger información de los empleados (que son los que llevan adelante día a día la operación) a fin de ser utilizada en los distintos procesos del negocio de manera productiva.
Las empresas dividen la información a transmitir a sus empleados entre: información técnica a fin de dar herramientas para el trabajo como cursos online, normativa sobre procedimientos, información sobre productos y servicios e información corporativa que tiene por objetivo establecer normas de conducta, fomentar la cultura interna y una forma de trabajo especial, como el código de ética, misión, visión y valores.
A su vez dado que la entrega y lectura de esta información no es efectiva cuando los empleados perciben que es bajada desde autoridad y tienen una obligación de asimilarla, (entregando manuales obligatorios de lectura, folletos, etc.) las empresas organizan actividades e integración para transmitir esta información de una manera más efectiva y horizontal.
Por otro lado, entre los mecanismos de recolección de información se encuentran la encuesta de clima organizacional, las reuniones donde los empleados transmiten ideas, dudas, problemas, quejas, o cuentan como realizan determinado trabajo a fin de que otros compañeros sepan como se realiza la tarea.
Sin tener en cuenta estos dos circuitos (el de la comunicación ascendente y la comunicación descendente) la gestión de la comunicación interna se vuelve ineficiente y medir su efectividad para justificar a la alta dirección mayores recursos será muy difícil.
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