La capacitación por un lado, es el plan que se alinea con los objetivos estratégicos del negocio, para impartir a los empleados motivación y transmitir los conocimientos y habilidades necesarios para llevar adelante los requerimientos del puesto de trabajo. Por su parte el desarrollo de los recursos humanos implica un aprendizaje que va más allá de la capacitación para el puesto de trabajo, y tiene un enfoque a largo plazo. Por un lado para satisfacer los requerimientos permanentes del mercado, los clientes, las empresas deben mejorar el desempeño general.
Lograr mayores rendimientos a través de la capacitación y desarrollo es la meta estratégica en todas las organizaciones. Consideran la capacitación bien planificada una inversión y no un gasto. Los programas de capacitación fortalecen la satisfacción del cliente, contribuyen al desarrollo organizacional, e impactan positivamente en los resultados financieros.
Un estudio financiado por el Departamento de Educación de los Estados Unidos, desatacó el potencial de la capacitación corporativa para influir en la productividad. Las conclusiones a las que arribaron fueron.
Un aumento del 10% del capital en acciones de capacitación aumenta la productividad en 3,2%
Un incremento del 10% de las horas de trabajo de una persona aumenta la productividad en 6 %
Un aumento del 10% del nivel educativo de una persona aumenta la productividad en 8,6%
El Gerente de Capacitación y Desarrollo es responsable de diseñar y desarrollar un plan de capacitación anual que combine tanto la formación técnica de todo el personal, según la descripción del puesto, la formación en la cultura corporativa (código de ética, valores corporativos, compromiso con la RSE, etc.) y el desarrollo del personal, que incluye acciones segmentadas por públicos, planes de carrera, preparación según el plan de sucesión, rotaciones y acciones de desarrollo humano como equilibrio entre vida laboral y personal.
BIBLIOGRAFÍA: Administración de recursos humanos Escrito por R. Wayne Mondy, Robert M. Noe