En el ámbito político, económico y empresarial se denomina recursos humanos a las personas en la medida que desempeñan una labor relacionada con la producción de bienes y servicios. Los recursos humanos forman una parte importantísima de una organización. Entendemos por organización cualquier organización social que tiene un fin político, social o económico, por ejemplo un continente, un país, una región, una provincia, una empresa, un organismo del Estado, una organización sindical, una ONG, etc.
Otra acepción más familiar o coloquial del término, se produce cuando se dice ‘recursos humanos’ en reemplazo de la frase ‘departamento de recursos humanos’. “Envié mi curriculum a recursos humanos” o “Fui a buscar mi recibo de sueldo a recursos humanos”, se dice.
La existencia del capital humano que se materializa en la aplicación de conocimientos, fuerza de trabajo y capacidades técnicas y operativas requiere que dicho capital sea gestionado según los principios de la eficiencia y eficacia para poder cumplir con objetivos específicos. Los gestores de ese capital son profesionales especializados que tienen grupos y/o equipos de trabajo a su cargo. Dentro de estos profesionales altamente capacitados para esta tarea, muchas veces se distinguen entre gestores (o managers) y líderes.
El departamento de recursos humanos se ocupa en general de llevar adelante temas macro que hacen a la administración, reclutamiento y selección, capacitación y control de los recursos humanos. En los últimos años, con la globalización y la creciente competencia en los mercados, las funciones del departamento de recursos humanos se han ido ampliando y sofisticando cada vez más. Hoy tratan temas relacionados con la retención y el desarrollo de talentos, la gestión del conocimiento, la formación de equipos virtuales, políticas de expatriación y complejas negociaciones sindicales.
Recursos Humanos y la polémica del término
A pesar de adentrarnos al SXXI, el término de recursos humanos genera alguna que otra controversia. Hay quienes motivados a menudo por ideas de izquierda creen en forma equivocada que la palabra “recursos” se utiliza como adjetivo calificativo y esgrimen: “los humanos no son recursos”. En la vida real, el término recursos humanos se utiliza habitualmente en forma de sujeto (las personas se transforman en sujeto productor gracias al trabajo) y no como adjetivo calificativo de los seres humanos, ni de la especie humana.
El perfeccionamiento de la gestión de recursos humanos, además de producir resultados económicos o políticos, casi siempre colabora en lograr el éxito y la felicidad de las personas.
En mayor o menor medida todos somos recursos humanos de una sociedad, ya sea en una empresa, una comunidad, o un país en la medida que colaboramos produciendo capital de valor que otros miembros de la sociedad toman para sí, sea tangible o intangible.
Hay quienes consideran que los desempleados también son recursos humanos de un país, ya que son la prueba visible de una economía de mercado deficiente. Hay quienes consideran a los ancianos, los recursos humanos de mayor valía para un país ya que producen un tipo de capital social único, por transmitir las costumbres, tradiciones, historia y enseñanzas adquiridas a las nuevas generaciones.