El Sindicato de Mecanicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), había impuesto un plazo hasta el 15 de Septiembre, y amenaza con iniciar medidas de fuerza, en apoyo a su reclamo de una mejora salarial del 50 por ciento.
En una declaración ACARA acusó al gremio de reclamar un aumento salarial "desafiando así todos los intentos del gobierno por frenar el proceso inflacionario, cuestión que generará graves daños a la economía".
La entidad que agrupa a los concesionarios compará el reclamo de SMATA con el realizado en 1975, cuando las paritarias sindicales desataron un proceso inflacionario superior al cien por ciento.
Tras el fracaso en las negociaciones mantenidas ACARA señaló que el SMATA "amenazó con medidas de fuerzas a partir de la semana próxima llegando a paralizar toda la industria automotriz".
Explicó que en la negociación salarial ofreció al gremio "dos ofertas superadoras" de un aumento del 30 por ciento por un año y otra del 50 por ciento por dos años".
En su declaración ACARA pidió al SMATA que "recapacite" al calificar de "desmedido" y "de "fuera de toda lógica", y que tenga en cuenta las variables reales de la economía, aceptando la oferta presentada en las negociaciones.
Acara y Smata, que lidera José Rodríguez, habían acordado en agosto un aumento del 10 por ciento y el gremio reclama un 140 por ciento adicional, por el plazo de un año, sobre los básicos de convenio.
La cámara había sostenido la imposibilidad de otorgar ese aumento argumentando que debe acordar un salario a nivel nacional, con las delegaciones de las 24 provincias que tienen mercados muy desiguales.
Por su parte, el SMATA había fundamentado su reclamo salarial en que el sector vendió durante este año 568.000 autos cero kilómetro y 1.320.000 usados y para este año se espera llegar a las 600.000 unidades cero kilómetro.