BUENOS AIRES. La Universidad Di Tella y la consultora Adecco armaron un índice que compara el nivel de empleo, las condiciones y tendencias laborales en cinco países latinoamericanos. Brasil resultó el mejor posicionado, mientras que la Argentina y Chile se ubicaron a la cola. A futuro, Argentina se separará aún más del resto y se ubicará en la zona más crítica.
Estamos regular pero podríamos ir peor”, ése es el diagnóstico que brinda para la Argentina el flamante Índice Laboral de América Latina (ILAM), desarrollado por el Centro de Investigación en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella y la consultora internacional de Recursos Humanos Adecco. Se trata de un indicador que resume cuatro aspectos de la realidad laboral: la ocupación (tasa de actividad y empleo ); la “apertura” (inclusión laboral de grupos vulnerables como jóvenes y mujeres); el desempleo (tasa de subocupación y desocupación) y la “dinámica” (relación entre el salario real y la productividad).
De manera similar al Euroíndice, que funciona como termómetro de la situación laboral en siete países del viejo continente, el ILAM pretende monitorear la realidad del empleo en cinco países latinoamericanos: Argentina, Brasil, Chile, Colombia y México.
Según el indicador, elaborado en base a datos de los institutos oficiales de estadísticas de cada país desde 2005 a 2008, la Argentina presenta actualmente 52,2 puntos, una cifra que se ubica por debajo de la media latinoamericana (que es de 56,2 puntos) en la zona clasificada como “Regular”. Apenas unos puntos por debajo se ubica Chile (51,36) y, liderando de lejos, Brasil, que se posiciona cómodo en la zona Muy Buena de la tabla.
Esto se explica en que aunque este país presenta una mayor desocupación, el resto de los indicadores, sobre todo el de “dinámica” (relación entre productividad y salario) resultan positivos. El socio mayor del Mercosur alcanzó 68,8 puntos en el ILAM, seguido por México con 59,9 puntos. Ambos países son los únicos que se sitúan por encima de la media latinoamericana.
Y aunque el panorama relevado en el 2008 para la mayoría de la región, no fue muy positivo, el 2009 no se presenta más auspicioso. Las proyecciones regionales señalan que el índice continuará una tendencia a la baja, que se presenta desde mediados de 2008, impulsada por una clara desmejora en las condiciones de empleo. Y esto se aplica especialmente a Argentina, que para fines de año obtendría apenas 38,09 puntos, posicionándose en la crítica zona “Mala” y convirtiéndose en el peor país de la región, por lejos.
Para este año, se prevé en el país una “caída en el nivel de ocupación, aumento del desempleo y deterioro de la relación entre productividad y salario real (caen ambos)”, señala Martín González Rozada, del Centro de Investigación en Finanzas de la Universidad Torcuato Di Tella, uno de los autores del informe.
Esta caída en el nivel de empleo y el aumento de la desocupación será general para los cinco países evaluados. México es, históricamente, el que menor desocupación presenta (4,26% en 2008), seguido por Brasil (7,26 %), Argentina (7,3% según el Indec), Chile (7,48%) y Colombia (10,51%). Se esperan 946.000 nuevos desocupados en la región, 364.000 de ellos en la Argentina, según destaca el informe.
Los especialistas de la Universidad Di Tella plantean, “en un escenario moderado de crisis económica”, que la desocupación en la Argentina se situará en alrededor del 10%. “El 2008 fue un año difícil para el país, debido en parte a la crisis internacional, y en parte a errores propios como el mal manejo gubernamental del conflicto con el campo. Esto se reflejó en una desaceleración de la actividad económica a partir del segundo semestre, y sobre todo, un deterioro de las expectativas que continúa en 2009”, dice Rozada.
La utilidad de este índice es que compila datos que se encuentran dispersos en distintos organismos de estadística de los países y los presenta de una forma que permite comparar la evolución de los distintos mercados laborales. Es un indicador para empresarios, académicos, analistas y público en general, que además de resumir la situación del empleo en un momento dado, permite hacer proyecciones en el mediano plazo. “El hecho de haber elegido a estos cinco países responde a que entre todos, representan el 80% del PBI de la región y el 70% de la población, además de contar con datos comparables para todos ellos”, explica Rozada.
La idea es incorporar al índice otros aspectos de la realidad laboral, en forma de documentos complementarios. Por ejemplo, un panorama del mercado informal de trabajo (de enorme peso en algunos países de la región como México y Colombia), informes sectoriales según cada tipo de industria, o informes sobre la situación de ciertos grupos etarios como los menores de 25 años, o los mayores de 40.
Por el momento, aunque los parámetros que utiliza el ILAM no son totalmente comparables con los del Euroíndice, Rozada admite que “la situación laboral es hoy más dramática en los países de Europa, los que reflejan mayor deterioro en todas las dimensiones, especialmente desocupación”.
“La crisis les pegó de lleno, mientras que en América latina aún no mostró su peor cara”, explica el especialista de la Di Tella. En tanto, fuentes de la consultora Adecco señalan que, según cifras propias, en el primer trimestre la caída de contratación de personal temporal (uno de los indicadores más sensibles del desempleo) fue del 45% en Italia, por caso, mientras que en la Argentina alcanzó apenas al 5%.
Cómo rankeó Argentina
En el cuatro trimestre del 2008, alcanzó los 52,2 puntos, ubicándose en la zona de clasificación consideradas regulares y por debajo de la media latinoamericana.
Cayó 4,9% con respecto al tercer trimestre del 2008, siendo éste el cuarto registro consecutivo en el que el indicador disminuyó.
En términos interanuales, la merma fue del 11,7%.
La dimensión Dinámica (la relación entre el salario real y la productividad) fue la que principalmente impulsó la baja.
ILAM: Empleo en clave latina
Brasil alcanzó los 68,8 puntos en el ILAM, ubicándose en el primer puesto, posición que le arrebatara México a principios del 2008.
Colombia, con 48,1 puntos, obtuvo durante el cuarto trimestre del 2008 la peor puntuación del grupo, ubicándose en la mitad inferior de la zona regular.
Argentina y Chile, con 52,9 y 51,4 puntos respectivamente, se ubican en la zona regular y por debajo de la media latinoamericana.
A excepción de Brasil, todos presentan una tendencia decreciente en la segunda mitad del 2008.
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