Las vaivenes económicos de las últimas décadas desalentaron el estudio de oficios. Y golpearon el interés por estudiar ingeniería. Hoy, las empresas no encuentran personal acorde con sus necesidades. Decidieron capacitar a jóvenes y alentar las carreras afines.
El mercado de ingeniería y construcción, respecto de otros sectores, es muy dependiente de la situación del país y se sustenta en la buena calidad de los recursos humanos.
Desde mediados de los ‘70, el área de construcción y proyectos de inversión ha ido decayendo, con breves períodos de desarrollo. Así fue que la falta de estabilidad del mercado generó la carencia de profesionales y técnicos calificados en la industria en general.
Como otras profesiones y oficios eran más demandados que los industriales, egresaron menos ingenieros de las facultades y fueron pocos los jóvenes que se capacitaron para trabajar en el sector. Empezaron a faltar en el mercado laboral jefes de obras, capataces, carpinteros, dibujantes, proyectistas, entre otros. Además, entre los ‘80 y ‘90, hubo una fuga de personal capacitado que se fue a trabajar al exterior.
El siglo XXI sorprendió al país sin técnicos y sin tecnología. Por eso, en esta nueva etapa, se ha vuelto a valorar al ingeniero y a la ingeniería, a los capacitados en la industria, porque la problemática hoy es cómo afrontar la mayor demanda de esos recursos humanos. Entonces, muchas empresas del sector se orientaron a capacitar a su personal y a las nuevas generaciones de jóvenes profesionales. Es el caso de Bautec S.A., grupo empresario nacional que desde 1992 se especializa en la construcción integral de obras industriales, logística y supermercados, y CH2M HILL-Lockwood Greene, compañía especializada en ingeniería y construcción de proyectos industriales y comerciales.
Según Roberto Massa, director de Operaciones de CH2M Hill-Lockwood Greene, “para poder competir, la única forma es capacitar al personal de la empresa. El mercado de ingeniería está totalmente saturado y hay pocos recursos. El único movimiento que hay en el mercado es de rotación de gente de una empresa a la otra, entonces la única forma de afrontarlo es capacitar al personal internamente para hacerlo crecer y tomar posiciones nuevas e incorporar personal nuevo, recién egresados, técnicos de colegios, etc”.
Massa reconoció que la empresa “está reclutando jóvenes (técnicos de las escuelas industriales), para que estudien una carrera universitaria, trabajen en la empresa como técnicos y puedan hacer una carrera en la compañía, o para los jóvenes profesionales que están recién recibidos y quieran empezar en la rama de la arquitectura o la ingeniería eléctrica, electrónica, electromecánica o mecánica”.
El titular de Bautec, Luis Oyuela, destacó que su trabajo se sustenta en la buena calidad humana y que ofrecen servicio de obra y del personal que las ejecuta. “Por eso necesitamos personal capacitado y entrenado, que hoy cuesta mucho conseguir. Hay una carencia de profesionales o calificados en la industria en general. Hoy necesitamos buenos ingenieros calculistas, jefes de obra, capataces, oficiales especializados, carpinteros, soldadores, dibujantes, proyectistas, mecánicos, y es muy difícil conseguirlos”.
Analizó que hay un mucha gente excluida del sistema que podría ser reincorporada, con posibilidades de trabajo. “Es gente marginada que necesita ser asistida, con un foco puesto en el trabajo. Hay dos puntas que pueden ser unidas: hace falta personal entrenado y hay gente que necesita trabajo. Entrenemos gente para ello, entonces”, enfatizó Oyuela.
Argentina: las grandes empresas constructoras hacen escuela en recursos humanos
Las vaivenes económicos de las últimas décadas desalentaron el estudio de oficios. Y golpearon el interés por estudiar ingeniería. Hoy, las empresas no encuentran personal acorde con sus necesidades. Decidieron capacitar a jóvenes y alentar las carreras afines.
El mercado de ingeniería y construcción, respecto de otros sectores, es muy dependiente de la situación del país y se sustenta en la buena calidad de los recursos humanos.
Desde mediados de los ‘70, el área de construcción y proyectos de inversión ha ido decayendo, con breves períodos de desarrollo. Así fue que la falta de estabilidad del mercado generó la carencia de profesionales y técnicos calificados en la industria en general.
Como otras profesiones y oficios eran más demandados que los industriales, egresaron menos ingenieros de las facultades y fueron pocos los jóvenes que se capacitaron para trabajar en el sector. Empezaron a faltar en el mercado laboral jefes de obras, capataces, carpinteros, dibujantes, proyectistas, entre otros. Además, entre los ‘80 y ‘90, hubo una fuga de personal capacitado que se fue a trabajar al exterior.
El siglo XXI sorprendió al país sin técnicos y sin tecnología. Por eso, en esta nueva etapa, se ha vuelto a valorar al ingeniero y a la ingeniería, a los capacitados en la industria, porque la problemática hoy es cómo afrontar la mayor demanda de esos recursos humanos. Entonces, muchas empresas del sector se orientaron a capacitar a su personal y a las nuevas generaciones de jóvenes profesionales. Es el caso de Bautec S.A., grupo empresario nacional que desde 1992 se especializa en la construcción integral de obras industriales, logística y supermercados, y CH2M HILL-Lockwood Greene, compañía especializada en ingeniería y construcción de proyectos industriales y comerciales.
Según Roberto Massa, director de Operaciones de CH2M Hill-Lockwood Greene, “para poder competir, la única forma es capacitar al personal de la empresa. El mercado de ingeniería está totalmente saturado y hay pocos recursos. El único movimiento que hay en el mercado es de rotación de gente de una empresa a la otra, entonces la única forma de afrontarlo es capacitar al personal internamente para hacerlo crecer y tomar posiciones nuevas e incorporar personal nuevo, recién egresados, técnicos de colegios, etc”.
Massa reconoció que la empresa “está reclutando jóvenes (técnicos de las escuelas industriales), para que estudien una carrera universitaria, trabajen en la empresa como técnicos y puedan hacer una carrera en la compañía, o para los jóvenes profesionales que están recién recibidos y quieran empezar en la rama de la arquitectura o la ingeniería eléctrica, electrónica, electromecánica o mecánica”.
El titular de Bautec, Luis Oyuela, destacó que su trabajo se sustenta en la buena calidad humana y que ofrecen servicio de obra y del personal que las ejecuta. “Por eso necesitamos personal capacitado y entrenado, que hoy cuesta mucho conseguir. Hay una carencia de profesionales o calificados en la industria en general. Hoy necesitamos buenos ingenieros calculistas, jefes de obra, capataces, oficiales especializados, carpinteros, soldadores, dibujantes, proyectistas, mecánicos, y es muy difícil conseguirlos”.
Analizó que hay un mucha gente excluida del sistema que podría ser reincorporada, con posibilidades de trabajo. “Es gente marginada que necesita ser asistida, con un foco puesto en el trabajo. Hay dos puntas que pueden ser unidas: hace falta personal entrenado y hay gente que necesita trabajo. Entrenemos gente para ello, entonces”, enfatizó Oyuela.