PEKIN. El crecimiento del ingreso en el área rural de China se desacelerará este año, dado que los sectores agrícolas deberán absorber millones de trabajadores despedidos de las fábricas golpeadas por la crisis financiera global, dijo el miércoles un funcionario.
Pese a los esfuerzos del Gobierno por estrechar la brecha entre los ingresos rurales y los urbanos, el ingreso de los agricultores -que promedió 4.761 yuanes el año pasado- ha caído cada vez más por detrás de los de los habitantes de las ciudades.
Los ingresos de los agricultores crecerían un 6 por ciento en el 2009 frente al alza del 8 por ciento del año pasado, según datos publicados el miércoles por la Oficina Nacional de Estadísticas y la Academia China de Ciencias Sociales.
"La industria agrícola de China probablemente esté enfrentando su desafío más severo durante los últimos 30 años", dijo Zhang Hongyu, director de políticas del Ministerio de Agricultura.
Una baja en las exportaciones de productos agrícolas y un alza del desempleo entre los trabajadores migrantes se combinarán para impactar negativamente sobre el crecimiento del ingreso rural este año, señaló Zhang en un foro.
La Oficina Nacional de Estadísticas estimó el mes pasado que el número de trabajadores migrantes sin empleo había alcanzado a 23 millones.
Unos 130 millones de campesinos chinos viajan a las ciudades cada año para trabajar en fábricas, restaurantes u obras de construcción, pero últimamente muchos debieron regresar ante el mal desempeño del sector exportador y de los mercados de bienes raíces.
Los ingresos promedio de los habitantes de las ciudades son 3,31 veces superiores a los de los casi 470 millones de agricultores del país, frente a las 2,47 veces de 1997.