Al menos 20 vuelos que debían aterrizar o despegar desde el Aeroparque metropolitano Jorge Newbery tuvieron demoras por una disputa interna en el gremio de los controladores de vuelos.
La medida de fuerza tuvo un fuerte impacto desde las primeras horas de la este miércoles y hasta entrada la tarde por un reclamo que plantea un sector gremial del gremio autorizado por el Ministerio de Trabajo.
La protesta se cumplió mediante el sistema de "trabajo a reglamento", por el que se extendía el tiempo de separación entre los aterrizajes y despegues de las aeronaves que operan desde la base aérea de la Ciudad de Buenos Aires.
El titular del sindicato, César Sala, acusó en declaraciones al canal de cable Todo Noticias al jefe de la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), Ricardo Cirielli, de estar "atrás" de la medida de fuerza y de liderar el gremio denominado "controladores agremiados".
"No hay razón para que se esté realizando esta medida de fuerza, que tiene de rehenes a los pasajeros y a los turistas que viajaban desde Aeroparque", manifestó el dirigente sindical "oficial".
Sala también resaltó que en las últimas negociaciones "se lograron aumentos de sueldo de más del 50 por ciento y un retroactivo reconocido de cerca de 20 mil pesos por cada compañero".
El miércoles, cientos de pasajeros sufrieron demoras y cancelaciones en más de una veintena de vuelos de las empresas Aerolíneas Argentinas y Austral en todo el país, a raíz de un paro realizado por azafatas y comisarios de a bordo de la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA).
La medida de fuerza fue suspendida por el gremio tras la intervención del ministerio de Trabajo de la Nación, que dictó una conciliación obligatoria.
El paro sorprendió en esa oportunidad a cientos pasajeros que acudieron al Aeroparque Jorge Newbery para tomar sus vuelos rumbo a diferentes destinos del país y Sudamérica y en aeropuertos del interior.
Los vuelos afectados tenían como destino Mendoza, Corrientes, Catamarca, Salta, Tucumán, Tierra del Fuego, Neuquén, Río Negro y Córdoba, mientras que a nivel internacional fueron cancelados los viajes a Punta del Este, San Pablo y Santiago de Chile.
El conflicto gremial de las azafatas y comisarios de a bordo de la AAA se inició en ese mometo a raíz de que los tripulantes no avalaron cursos dictados por otro sindicato, la Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA), para operar en las nuevas unidades Embraer incorporadas a las flotas de Austral y Aerolíneas Argentinas.