La escasez de recursos humanos y la búsqueda de un gran "hit" que revolucione el mercado son los principales desafíos que deberá enfrentar la creciente industria de los videojuegos de Argentina en los próximos años.
El cambiante negocio de los videojuegos a nivel mundial está experimentando una veloz transformación por el fuerte desarrollo de las plataformas de juegos online y estos cambios impactan sobre la industria doméstica, que tuvo un crecimiento exponencial en la última década.
"Cambió internet y ese cambio impacta directamente en lo que es la industria del entretenimiento. Lo mismo le pasó a la música", dijo Martín Repetto, presidente ejecutivo de Minor Studios y secretario de la Asociación de Desarrolladores de Videojuegos de Argentina (ADVA).
La gran explosión en el crecimiento de esta industria, que se nutre en más de un 80 por ciento de inversión extranjera, se dio a nivel local tras la gran devaluación del peso argentino en la crisis de 2001/02, cuando el país representaba una gran oportunidad por la combinación de recursos humanos calificados y bajos costos de producción.
Entre el 2004 y el 2011, la tasa de crecimiento anual de la industria fue de entre el 30 y el 35 por ciento, según datos de ADVA. La facturación fue de 50 millones de dólares en el 2010.