MADRID. El 28% de los trabajadores españoles afirma que puede perder su empleo en los próximos meses como consecuencia de la crisis económica y del ajuste del empleo, mientras que el 49,3% desconoce si podría perder su empleo y el 22,7% está convencido de que lo conservará a pesar de los problemas económicos, según una encuesta realizada por Adecco.
En cuanto a los desempleados, el estudio concluye que las perspectivas de cara al futuro no son muy halagüeñas, ya que sólo el 9,4% de los parados confía en conseguir un empleo en menos de un mes, mientras que el 59,4% cree que tardará entre uno y seis meses en encontrarlo, un 14,2% considera que tardará de siete a doce meses y un 17% cree que tardará más de un año en lograr un empleo.
Adecco explica que la falta de ofertas de empleo hace que los parados amplíen su abanico de posibilidades, ya que el 77% de los parados aceptaría un trabajo inferior a su formación y experiencia, frente a un 7,2% que no lo admitiría y un 15,7% que no lo sabe. Además, para más de la mitad de los parados (55,35%) es indiferente el trabajo que consiga, mientras que el 32,39% busca un puesto similar al que tenía y el 12,26% prefiere uno totalmente diferente.
Según la encuesta, la gran mayoría de los españoles, empleados y desempleados, reconoce las dificultades que está provocando la actual crisis en el mercado laboral. En concreto, el 64,3% de los trabajadores valora la situación actual como mala, frente al 3,4% que la califica de buena y el 32,3% que la estima como regular. Entre los desempleados, el 80,2% la califica de mala, mientras que para el 19,5% es regular y sólo para el 0,3% es buena.
Además, ambos colectivos aseguran que la crisis no será temporal, ya que el 62% del total piensa que durará de uno a dos años, frente al 32% que asegura que durará más de dos años y al 5% que cree que será cuestión de meses. Para salir de la crisis, la mayoría se inclina por ayudar a las empresas para que sigan generando empleo, incentivar la contratación indefinida y bajar los impuestos.
Sobre la destrucción de empleo, el 68,3% de los encuestados asegura que no se ha centrado de forma especial en un colectivo concreto, frente al 12,7% que cree que los trabajadores de más edad están siendo los más perjudicados por la crisis. El 8,2% piensa que son los jóvenes los más afectados, el 7,9% que dice que son los inmigrantes y el 2,8% cree que son las mujeres.
De igual forma, el paro no ha hecho diferencias entre los trabajadores según su nivel de formación, ya que un 31,8% de los encuestados en paro posee formación profesional, un 31,1% tiene estudios universitarios; el 21,7%, estudios secundarios; y el 15,4%, elementales. Además, el 17,9% de los parados trabajaba en la construcción, el 8,2% en la industria, el 6,9% en la hostelería y el 6,8% en el comercio.
LOS SERVICIOS, EL SECTOR CON MÁS POSIBILIDADES.
En cuanto al tiempo que llevan en el paro, el 45,9% de los encuestados asegura que lleva de uno a seis meses, el 15,1% de siete a doce meses, el 17,6% más de un año y el 21,4% se quedó sin empleo hace sólo un mes. De cara al futuro, el 25% de los desempleados cree que el sector con más posibilidades para encontrar empleo es el de servicios, sobre todo en el comercio y la hostelería, seguido de la industria, la administración pública y las nuevas tecnologías.
Sobre los métodos para buscar empleo, la redes de contacto se sitúan como la vía mejor valorada (41,2% del total), y el Inem como la peor (67% del total). Por su parte, las consultoras de selección y las empresas de trabajo temporal se consideran una forma eficaz de buscar empleo por encima de los portales de empleo y la prensa.
En cuanto a la influencia de la crisis en los hogares, uno de cada tres encuestados asegura que tiene algún miembro de su familia en paro. En concreto, el 58,3% de los encuestados con familiares en paro tiene a una persona sin trabajar, el 31% a dos miembros, el 8% a tres y el 2% a más de cuatro familiares en paro.
Además, Adecco asegura que la crisis ha llevado a una contención de gastos que no sólo se está produciendo en las empresas, ya que el 79,3% de los encuestados afirma que ha recortado sus gastos personales para ayudar a su economía doméstica, mientras que el 20,7% dice no haber cambiado sus hábitos de consumo en los últimos meses.