El déficit fiscal comenzó a provocar el retraso del pago de sueldos de los empleados públicos en las provincias, que este año presentarían un rojo de entre 11.000 y 12.000 millones de pesos.
Cuando aún faltan cinco meses para finalizar el año, ya hay cinco distritos que no pudieron abonar sueldos de julio o aguinaldos, por lo que debieron posponer pagos o hacerlos escalonados, según publicó un matutino porteño.
Las provincias de Río Negro, Neuquén, Tierra del Fuego, Jujuy y Chaco son los distritos que ya presentan complicaciones, y en los próximos meses podrían sumarse Santa Cruz y Buenos Aires.
El gobierno de rionegrino solamente pagó los aguinaldos a un tercio de los empleados públicos, mientras que el neuquino prometió efectivizar la segunda cuota el 21 de este mes.
En una situación similar se encuentra Tierra del Fuego, que acaba de depositar 2000 pesos en concepto de "adelanto a cuenta del sueldo" de los haberes de julio.
También Jujuy tiene serias dificultades ya que todavía ni siquiera dio a conocer el cronograma de pago de los salarios del último mes.
A su vez, Chaco realizó depósitos escalonados de salarios hasta los 4.000 pesos y demoró el pago a los contratados, por lo que el gobernador Jorge Capitanich tuvo que reconstruir su plan de gastos.
Si bien otras provincias no demostraron hasta el momento impedimentos para pagar salarios, Santa Fe tuvo suspendido por 120 días el pago de certificados de obra pública, por ejemplo.
Paralelamente, la mayoría de las provincias dejaron de cumplir con el pago a proveedores y contratistas, o directamente suspendieron las obras públicas ya iniciadas.
El gobernador mendocino Celso Jaque recortó el gasto público y congeló sueldos, horas extras, postergó licitaciones y compras y hasta limitó el uso de aviones a funcionarios para ahorrar.
El objetivo de Jaque es que el Estado ahorre 150 millones de pesos, mientras que en Misiones algunas municipalidades, como Eldorado, pagan parte de los salarios en bonos alimentarios.
El rojo de las provincias subió aceleradamente en los últimos meses como consecuencia de la abrupta caída en la recaudación tributaria y de la reducción en el envío de fondos desde la Nación en concepto de coparticipación.
La consultora Economía y Regiones (E&R) hizo público un informe en el que estima que este año el 24,8 por ciento de la recaudación de la Nación irá a las provincias, contra el 30,1 por ciento que se destinaba en 2002.
Si se hubiera mantenido ese porcentaje, en 2009 hubieran recibido 90.675 millones de pesos en vez de los 74.552 millones que les tocarán.
Entre los distritos más complicados están Buenos Aires (reconoce el gobierno un déficit de 5500 millones de pesos), Santa Cruz (2042 millones), Capital (1000 millones), Mendoza y Tierra del Fuego (600 millones cada una), Santa Fe (510), y Neuquén y Entre Ríos (400 millones). Sólo sumando el déficit en esos ocho distritos, el rojo fiscal alcanzará a 11.052 millones, más los desequilibrios más moderados de otros distritos.
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