MADRID. El Gobierno español manifestó su "profundo malestar" con la patronal el jueves por la noche ante sus propuestas en el marco del diálogo social, que apuntan sobre todo al libre despido.
El ministerio de Trabajo expresó en un comunicado "el profundo malestar del Gobierno ante la actitud de la CEOE", la patronal española.
En los últimos meses, el Gobierno, la patronal y los sindicatos mantuvieron varias reuniones para intentar un acuerdo sobre las reformas en el campo laboral, tendientes a mejorar la situación del empleo en España, donde la desocupación aumenta progresivamente desde el estallido de la crisis. Este viernes se ha sabido que en el segundo trimestre del año el desempleo subía al 17,92%.
El principal obstáculo para un acuerdo era hasta ahora el alcance de la reducción de las cotizaciones patronales a la Seguridad Social.
Pero la actitud de la patronal desde el miércoles por la noche puso fuera de sí al Gobierno, que esperaba llegar a un acuerdo antes de agosto.
El miércoles por la tarde, "el presidente de la organización empresarial fue incapaz de explicar, en la cena celebrada ayer en Moncloa, las razones por las que no aceptaba el documento que sí habían consensuado ya sindicatos y Gobierno", explicaba el comunicado de Trabajo, cartera de Celestino Corbacho.
"Sin argumento alguno que ofrecer para justificar su negativa, los representantes de la CEOE se comprometieron a enviar un documento alternativo a los sindicatos y al Gobierno hoy jueves a las doce del mediodía", añadió.
"El documento de la patronal llegó a las siete de la tarde, con lo que se imposibilitaba de facto la celebración de una reunión" en el mismo día.
Pero lo que realmente ha causado un profundo malestar en el Gobierno es el contenido de la propuesta que, "no solo no respeta las líneas rojas en las que se basaba todo el proceso de diálogo, sino que por ejemplo exigen que los trabajadores no tengan posibilidad de defensa jurídica en caso de despido", lamentó el documento del gobierno.
"Es decir, no solo despido más barato, sino que despido libre", según el Gobierno, que convocó una reunión este viernes por la tarde para que la patronal explique "a qué se debe su cambio de actitud, al exigir unas medidas que en ningún caso y por distintas razones, ni el Gobierno ni los sindicatos pueden admitir".
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