Holanda, con 48,1% encabeza por amplia diferencia la generalización de este tipo de ocupaciones, mientras que España se encuentra debajo del promedio europeo, con un total de 12,2% de ocupados en tareas de tiempo parcial
España es el cuarto país con menor penetración del empleo a tiempo parcial entre los varones, con sólo un 4,7%, mientras que para el sexo femenino, la porción de ocupados a media jornada es de un 22%, según el estudio de Adecco, en colaboración con el IESE, acerca de la importancia del empleo a tiempo parcial en los diferentes países de la Unión Europea.
Los empleos de tiempo parcial pasaron a representar el 12,2% del total, superando en 1,2 puntos porcentuales el dato de hace dos años. Tal incremento alcanzó a 1,3 puntos porcentuales entre los varones con educación secundaria incompleta o inferior.
En Septiembre de 2009 la UE-25 tenía un 19,2% de sus ocupados trabajando a tiempo parcial. Los datos individuales de cada país presentan una amplia diversidad. Holanda, con 48,1% encabeza por amplia diferencia la generalización de este tipo de ocupaciones, mientras que España se encuentra debajo del promedio europeo, con un total de 12,2% de ocupados en tareas de tiempo parcial.
En todos los países de la UE-25, el porcentaje de mujeres ocupadas a tiempo parcial supera al de varones. Por cada varón que trabaja a tiempo parcial hay más de 3 mujeres que hacen lo mismo.
El porcentaje de personas que trabaja a tiempo parcial es mayor entre quienes cuentan con una menor formación. En laUE-25, un 22,3% de quienes han realizado estudios de hasta secundaria incompleta tienen un empleo de media jornada, mientras que ese mismo es el caso del 18,3% de los que tienen una educación formal más amplia.
Entre 2007 y 2009 aumentó la proporción de ocupados a media jornada en 12 de los 14 países estudiados. El incremento fue de mayor envergadura en el caso masculino, es decir, en el sexo que ha venido concentrando la pérdida de puestos de trabajo en lo que va de crisis.
La misma dinámica, es decir, una mayor participación de los empleos de media jornada, que resulta más significativa entre los varones y aún más entre los hombres con menor formación, se observa también en Holanda, Reino Unido, Grecia y España.