El secretario general de UGT, Cándido Méndez, negó hoy que la reforma laboral que ayer cerraron Gobierno, sindicatos y patronal sea poco ambiciosa y subrayó que será ‘claramente útil’ para avanzar en la reducción de la temporalidad.
En declaraciones a Antena 3 recogidas por Europa Press, Méndez recordó que el objetivo principal de la reforma era el de encontrar fórmulas para rebajar el elevado número de contratos temporales, situación que afecta a 5,3 millones de trabajadores en España.
Ante las críticas de algunos sectores que consideran insuficiente o de poco calado la reforma que se ha pactado, Méndez manifestó que a veces ‘se ven los toros de la barrera’ y dijo que esos calificativos que se le ponen al acuerdo deberían ser reemplazados por el adjetivo ‘útil’.
En este sentido, recordó que, aunque sindicatos y CEOE compartían desde el inicio su intención de rebajar la temporalidad, los instrumentos que cada parte proponía para ello eran ‘muy distintos’. Para Méndez, lo importante es que la reforma resultará eficaz para reducir los contratos temporales, preservando el marco actual de la contratación.
En cuanto a la posibilidad que abre la reforma para que las conversiones de contratos temporales se conviertan a contratos indefinidos con despidos de 33 días (más baratos que los de 45 días por año), Méndez afirmó que esta medida otorga garantías a los trabajadores de las que carecerían con un contrato temporal.
‘Lo que ocurrirá en la práctica es que un trabajador con un contrato precario, con cero patatero de indemnización y sin tutela judicial en caso de despido, ahora va a tener tutela judicial y una indemnización digna’, aseguró.
Respecto a la fórmula elegida por el Gobierno para aprobar la reforma, un decreto-ley que entrará en vigor el próximo 1 de julio, Méndez justificó esta elección, alegando que existe cierta urgencia ante la situación de la temporalidad en el mercado laboral español.
‘MEDIDAS DE GRAN ALCANCE’.
Además, el dirigente de UGT destacó que la reforma incluye medidas de ‘gran alcance’, que supondrán cambios importantes en el Estatuto de los Trabajadores. En concreto, Méndez se refirió a la condición de fijos que adquirirán los trabajadores temporales que, en un plazo de 30 meses, hayan encadenado dos o más contratos en un mismo de trabajo por un tiempo de dos años.
‘Por primera vez en la legislación laboral española se va a marcar un tope al encadenamiento de contratos y eso es una medida de gran alcance’, indicó el secretario general de UGT.
Preguntado por quién se encargará de velar para que esta medida se cumpla, Méndez subrayó que la reforma mejorará los medios a disposición de la Inspección de Trabajo, y creará un órgano tripartito entre Gobierno, patronal y sindicatos donde se definirán planes específicos para la estabilidad en el empleo.
En tercer lugar, y ante el supuesto de que los empresarios utilicen a varios trabajadores para cubrir un mismo puesto de trabajo, Méndez explicó que será la negociación colectiva quien actúe en estos casos.
Artículos relacionados
