Bruce Tuckman es un respetado psicopedagogo americano, quien primero describió las 4 fases del desarrollo de un grupo en 1965. Observando el comportamiento de pequeños grupos en distintos ámbitos, distinguió varias fases que atraviesan los grupos y dijo que todos los grupos tienen que alcanzar estas etapas antes de alcanzar su máxima efectividad.
En 1977 redefinió y desarrolló su modelo junto con Mary Ann Jensen al que agregó una 5ta fase. De ahí en más muchos han adaptado este modelo.
Las cuatro fases del desarrollo de grupos
Tuckman describió 4 fases diferentes que un grupo atraviesa antes de unirse y empezar a operar. Este proceso puede ser subconsciente pero entender las etapas puede ayudar al grupo a alcanzar su efectividad más rápido y con menos inconvenientes.
Etapa 1. Formación: El comportamiento individual se conduce por un deseo de ser aceptado por los otros, evadir la controversia y el conflicto.
Los problemas grandes y sentimientos se dejan de lado y las personas se focalizan por cumplir con la rutina, al igual que la organizacion del equipo quien hace que cosa, cuando se encuentran, etc. En esta etapa es cuando los individuos recopilan información e impresiones de los otros, y del alcance de la tarea a realizar y como abordarla. Es una etapa confortable, no hay demasiada prevención de conflictos.
Etapa 2. Asalto: Los miembros del grupo mantienen la cordialidad entre sí, mientras empiezan a aparecer los primeros temas de trabajo a resolver. La paciencia de algunos colapsará antes y se verán algunas confrontaciones menores que se resolverán pronto. Pueden estar relacionadas con el trabajo del grupo en sí mismo o con los roles y responsabilidades dentro del grupo. A algunos les parecerá bien empezar a lidiar con problemas mientras otros querrán seguir con la comodidad de la Etapa 1. Dependiendo de la cultura organizacional y de los individuos, el conflicto será más o menos suprimido pero estará ahí debajo de la superficie. Para manejar el conflicto, los individuos quizás sientan que estan ganando o perdiendo batallas y buscarán calridad en la estrucutra y en las políticas para prevenir que el conflicto persista.
Etapa 3. Estableciendo normas: Como la etapa 2 tiene que ver con “las reglas del compromiso” para el grupo que se establece, y el alcance de las tareas o responsabilidades del grupo son claras y acordadas. Se entienden unos con otros y pueden apreciar las habilidades y experiencias del otro. Los individuos escuchan al otro, se aprecian, se apoyan mutuamente y estan preparados para modificar puntos de vista pre concebidos: sienten que son parte de un grupo efectivo y cohesionado. Los individuos han tenido que trabajar duro para lograr esta etapa y puede que resistan cualquier presión para cambiar, especilamente del afuera, por miedo a que el grupo se desmorone o cambie a la etapa de asalto.
Etapa 4. Desempeño. No todos los grupos llegan a esta etapa caracterizada por un estado de independiencia y flexibilidad. Todos se conocen lo suficiente como para trabajr juntos y confían el uno en el otro para permitir una actividad independiente. Los roles y responsabilidades cambian de acuerdo a las necesidades. La identidad del grupo, lealtad y moral son elevados y cada uno está orientado a las personas y a las tareas de igual manera. Este alto grado de comodidad significa que toda la energía del grupo puede ser dirigida hacia las tareas que tienen en manos.
10 años después de describir estas 4 etapas, Tuckman revisó su concepto inicial y elaboró una etapa final.
Etapa 5: Levantar. Esta etapa tiene que ver con el fin o separación, tanto de tareas como del miembros del equipo. Los individuos estarán orgullosos de haber alcanzado tanto y estarán complacidos de haber formado parte de un grupo tan excelente. Necesitan recordar que han hecho y consecuentemente seguir adelante. Algunos autores describen la etapa 5 como “deformación” reconociendo el sentido de pérdida por los miembros del grupo.
El trabajo original de Tuckman describe la manera que ha observado grupos hayan sido estos conscientes o no.
Pero para nosotros el verdadero valor radica en reconocer si un grupo está en proceso de formación y ayudarlo a alcanzar la etapa de desempeño, pero un nuevo miembro quizás los lleve de nuevo a la etapa Asalto. Los buenos líderes se darán cuenta de esta situación y ayudarán al grupo a volver a la Etapa 4.