El mito de la inmigración en España proveniente de América Latina, Africa y Europa del Este se ha terminado, según datos oficiales difundidos por medios locales, que demuestran la reducción de llegadas y el aumento de regresos a los países de origen.
"Hace sólo dos años España era El Dorado. Ahora, son pocos los que vienen y cada vez más los que piensan en irse", escribió hoy el diario El País. Los datos revelan que las llegadas en embarcaciones precarias, las llamadas pateras, a las costas españolas se redujeron en un 40% en los primeros siete meses de 2009, mientras aumentan los regresos, afirmó ese medio, que citó como dato las matriculaciones escolares de extranjeros. "Aumentan, pero casi un 50% menos de como lo hacía en años anteriores", escribió El País.
Según Raúl Jiménez, miembro de una Asociación madrileña de ecuatorianos -que representan la principal comunidad extranjera en el país- "ya a finales del curso pasado muchas familias sacaron a sus chicos del colegio para enviarlos a Ecuador, porque sabían que no podían hacer frente a los gastos de uniformes, material". "Muchos ecuatorianos han agotado su prestación por desempleo, otros también han perdido sus casas porque al no poder pagar las hipotecas se las han quedado los bancos y ahora viven en albergues o comen en comedores sociales", añadió. El diario El País también indicó que las autorizaciones de residencia por reagrupación familiar fueron 38.279 hasta el 30 de junio de 2009, respecto de las 95.410 en 2008 y las 128.161 de 2007.
"Para traerse a los familiares tienen que demostrar que pueden mantenerlos económicamente y, con la crisis, cumplir los requisitos es prácticamente imposible", explicó Gustavo Fajardo, de una asociación de colombianos en España. "Tenemos datos de 7.000 cabezas de familia que no han podido traerse a sus hijos a España", prosiguió. "Además, al perder sus trabajos, muchos han perdido la residencia y se han convertido en irregulares", prosiguió.
Fuentes del ministerio del Interior, por su lado, revelaron que la península ibérica se vuelve menos atractiva también a causa del número elevado de repatriaciones y medidas de prevención de la inmigración que, gracias a la "cooperación" de la policía y los "acuerdos" con los países de origen, disminuyen "flujos clandestinos".
En ese sentido, la reforma de la Ley de Extranjería, la cuarta en nueve años y que superó su primera prueba parlamentaria al ser rechazadas las enmiendas de partidos de la oposición, garantizará "inmigración más ordenada", según expresó el gobierno español.
El número de desempleados registrados en las oficinas del Instituto Nacional del Empleo (INEM) subió en 84.985 personas en agosto respecto de julio un 2,4%-, según datos difundidos a principios de septiembre por el ministerio de Trabajo. España atraviesa una crisis desde principios de 2008 y que se agudizó a mediados de ese año con el desplome del sector de la construcción, modelo de crecimiento durante una década y que empleaba a muchos inmigrantes.
No obstante, los datos para el futuro del país son desalentadores. Economistas y empresarios aseguran que no ven creación de puestos de trabajo en la economía española hasta dentro de 4 o 5 años.