NUEVA YORK. JP Morgan Securites presentó el lunes una demanda contra un ex ejecutivo que administraba más de 200 millones de dólares en activos de clientes ricos, a quien acusó de compartir información sensible con otras firmas y de tratar de robarle clientes a favor su rival Morgan Stanley.
En papeles presentados a la corte estadounidense de distrito de Nueva York, la unidad de JP Morgan dijo que el argentino Hernán Arbizu, quien trabajó en el departamento de banca privada, era responsable de manejar "individuos de altos recursos" y sus negocios relacionados en Argentina y Chile para la empresa.
El banco de inversión lo acusó de intentar inducir a los clientes de JP Morgan a llevar sus negocios a Morgan Stanley .
Arbizu, que vivía en Connecticut mientras era empleado de JP Morgan, se fue a Argentina antes de ser despedido el mes pasado, dijeron los papeles de la corte. Presuntamente se llevó documentos robados.
"El acusado se involucró en esa mala práctica antes del momento de su renuncia a JP Morgan y después de unirse a Morgan Stanley, competidor directo de JP Morgan," dijo la demanda.
JP Morgan dijo que descubrió evidencia el mes pasado de que Arbizu había hecho transferencias electrónicas no autorizadas e ilegales entre las cuentas de un cliente de JP Morgan y cuentas de otras firmas.
La demanda también acusa que Arbizu robó información confidencial y activos pertenecientes a JP Morgan y sus clientes.
La empresa dijo que aún no ha evaluado el alcance total del daño provocado por las acciones de Arbizu, pero añadió que cree que "una exhaustiva investigación revelará conducta criminal más allá de las violaciones estatutarias contractuales y de la ley común detalladas en esta declaración jurada."
JP Morgan argumenta que sin la citación y la orden de restricción, el banco y sus clientes sufrirán un daño aún más difícil de reparar.
La empresa pidió a la corte que impida al acusado usar, difundir, trasmitir o destruir cualquier documento que le pertenezca o de sus clientes.
El banco busca la devolución de todo el material perteneciente a JP Morgan en posesión de Arbizu y solicita que se le impida intentar inducir a cualquiera de sus clientes a hacer negocios con otras firmas.
La empresa también pidió la ayuda de la corte para que se interrogue al acusado bajo juramento y que le imponga el pago de comisiones y costos de abogados.
Además, JP Morgan dijo que estaba presentando un reclamo contra Arbizu ante la Autoridad Reguladora de la Industria Financiera.