WASHINGTON. La población mundial mayor de 65 años se triplicará a mediados de siglo y la proporción será de uno en cada seis, con lo cual muchos países se verán en problemas para mantener a los ancianos.
El número de personas mayores de 65 años aumentó en un 23% desde el 2000 a 516 millones de personas, según cálculos del censo divulgados el martes. Eso significa más del doble en la tasa de crecimiento de la población general.
Esta tendencia sin embargo, no se cumple en América Latina, que es conocida por su alto índice de fertilidad, donde los menores de 19 años superan al grupo de mayores de 65 en una proporción de 5 a 1.
Para el 2050, tanto Brasil como México, donde hay un menor aumento de natalidad, los mayores de 65 llegarán al 18% de la población, comparado con el 25% de los jóvenes.
Mientras tanto Cuba, que tiene un alto índice de mayores de 65, acaba de subir su edad de jubilación otros cinco años con el objeto de demorar el pago de pensiones.
La población del mundo ha venido envejeciendo desde hace muchos años debido a la declinación de la tasa de nacimientos y los avances médicos que han extendido la vida de los mayores. Las personas de edad avanzada, que es el grupo de más rápido crecimiento, ahora constituyen menos del 8% de los 6.800 millones de habitantes de la población mundial. Pero los expertos en demografía advierten que aún está por producirse el cambio más marcado. Citaron que se avecina una ola de jubilaciones de la generación de postguerra y la generación de la Guardia Roja de China que reducirá las planillas de pensiones y agregarán más peso a los crecientes costos de salud.
Los países con mayor número de jubilados son Alemania, Italia, Japón y Mónaco, con un 20% o más de su población mayor de 65 años.
En Estados Unidos, las personas mayores de 65 años actualmente constituyen el 13% de la población, pero eso se duplicará a 88,5 millones a mediados de siglo. Dentro de dos años, aquéllos de mayor edad de la generación que nació tras concluir la Segunda Guerra Mundial, cumplirán 65 años. Y año tras año continuarán engrosando las filas de la jubilación, hasta llegar a una proporción de uno de cada cinco en el 2030.
"Cuando llegue al 2020 gran parte del mundo desarrollado entrará en una era de crisis fiscal, con un estancamiento real a largo plazo en su crecimiento económico y habrá desagradables batallas por reducir los beneficios de las personas de edad avanzada", destacó Richard Jackson, director de la Iniciativa Mundial de Envejecimiento, del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales.
"Países de economías emergentes como China, enfrentarán la real posibilidad del envejecimiento de la humanidad", agregó.
La actual proporción de edad en China, que es de 16 mayores de 65 por cada 100 trabajadores, se habrá duplicado para el 2025, y volverá a duplicarse para el 2050, fundamentalmente debido a la política de planificación familiar de un solo hijo, agregó Jackson.
A diferencia de otros países en el mundo industrializado, Estados Unidos se ha beneficiado de la inmigración de jóvenes residentes, que han contribuido a atenuar el envejecimiento de la población.