La tasa de empleo de los trabajadores con edades comprendidas entre los 55 y 64 años creció 4,9 puntos entre 2001 y 2006, hasta el 44,1%, según datos de Eurostat recogidos por el Instituto de Estudios Económicos (IEE).
De esta forma, España supera en 0,6 puntos la media europea (43,5%), aunque se queda a seis puntos de lograr el objetivo de la Estrategia de Lisboa para 2010 (50% de tasa de empleo) y a 25,5 puntos del país de la UE-27 con mayor tasa de empleo entre los trabajadores mayores, Suecia, con el 69,6%.
Por lo que respecta al resto de países de la UE-27, tras el país escandinavo se sitúa Dinamarca, con un 60,7%, seguido de Estonia (58,5%), Reino Unido (57,4%), Finlandia (54,5%) y Chipre (53,6), así como Letonia (53,3%), Irlanda (53,1%) y Portugal (50,1%).
Por encima de la media europea y de la tasa española también se colocan Lituania, Alemania, Países Bajos y República Checa, con un 49,6%, 48,4%, 47,7% y 45,2%, respectivamente.
Por su parte, Grecia (42,3%), Rumanía (41,7%) y Bulgaria (39,6%), así como Francia (37,6%) y Austria (35,5%) no superan la media de la UE-27.
Cerca del 30% se sitúan Hungría (33,6%), Luxemburgo (33,2%), Eslovaquia (33,1%), Eslovenia (32,6%) e Italia (32,5%), mientras que los últimos puestos están ocupados por Bélgica, Malta y Polonia, con tasas del 32%, 30% y 28,1%, respectivamente.
Entre los países que lograron un mayor incremento de la tasa de empleo de trabajadores mayores entre 2001 y 2006 están Letonia (+16,4 puntos), Bulgaria (+15,6), Eslovaquia y Lituania (ambos casos con un incremento de 10,7 puntos).
Mientras, Rumanía fue el único Estado miembro en el que se produjo un descenso de la tasa de empleo de trabajadores mayores, al pasar del 48,2% en 2001 al 41,7% en 2006.