GINEBRA. Lo peor de la crisis económica en materia política y social “está por venir”, advirtió este martes el director general de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Pascal Lamy, que arremetió de nuevo contra toda tentativa proteccionista.
“Lo peor de la crisis en materia social está por venir; esto quiere decir que lo peor de la crisis en materia política está por venir”, advirtió este martes Lamy en una rueda de prensa en Ginebra.
Las repercusiones de la crisis servirán para probar la resistencia de la OMC como institución capaz de contener el proteccionismo, agregó Lamy, en el marco de una conferencia de dos días sobre la Ayuda al Comercio.
“Si de verdad se quieren mantener los intercambios comerciales abiertos, se debe comprender (…) que la mejor forma es seguir abriéndolos”, de ahí “la urgencia” de concluir la ronda de Doha para la liberalización del comercio mundial, añadió, la víspera de la cumbre de los países del G8 en L\’Aquila (centro de Italia).
La Ronda de Doha para la liberalización del comercio mundial fue iniciada en 2001, pero desde entonces se ha visto estancada por los desacuerdos entre países industrializados y en vías de desarrollo sobre los aranceles aplicados a los productos agrícolas e industriales.
Respecto a la reunión del G8, en la que participará, Lamy dijo que su mensaje “será muy parecido” al que dirigió al G20 de Londres, en abril, y subrayó su intención de seguir “luchando contra el proteccionismo, que está ahí”.
La OMC denunció el miércoles pasado nuevos movimientos proteccionistas entre sus 153 países miembros y revisó a la baja sus previsiones sobre el comercio mundial. Éste se contraerá, según el informe, un 10% en 2009. El volumen de comercio de las economías desarrolladas se contraerá un 14%, mientras que el de las economías en desarrollo retrocederá un 7%.
El informe del miércoles pasado precisó que sin tomar en cuenta las medidas aplicadas ante la pandemia de gripe porcina, se adoptaron más del doble de barreras al comercio que medidas que lo liberalicen.
“El impacto de la ralentización de los intercambios comerciales será más duro para los países en desarrollo”, advirtió Lamy este martes.
Debido al estancamiento esperado de los intercambios comerciales, la ayuda al comercio “se ha convertido hoy en esencial”, subrayó Lamy.
El presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, que participó en la conferencia de la OMC el lunes, advirtió de que algunas de las medidas de estímulo introducidas por diferentes gobiernos para ayudar a las industrias más afectadas por la crisis podrían “descontrolarse” a medida de que crezca el desempleo.
“Los países industrializados han utilizado subvenciones para sus sectores en dificultades, mientras que países con menos recursos aumentan de forma selectiva sus barreras aduaneras”, dijo. “Estas tendencias pueden descontrolarse fácilmente en los próximos meses a medida que el desempleo crezca”, añadió.