NUEVA YORK. Un pequeño estudio realizado en Australia reveló que el 95 por ciento de los estudiantes secundarios tenía al menos un tipo de problema de sueño y que muy pocos jóvenes estarían dispuestos a cambiar sus hábitos para solucionarlo.
"Parece que la costumbre de dormir hasta tarde los domingos es algo que no quieren abandonar", dijo a Reuters Health el doctor Michael Gradisar, de la Flinders University en Adelaide, Australia.
Los 81 estudiantes evaluados informaron tardar mucho para dormirse, no descansar lo suficiente o hacerlo de manera dispar en la semana.
Durante el estudio de cuatro semanas de duración, los jóvenes, que tenían en promedio 16 años y un 33 por ciento eran varones, trataron de reducir a alrededor de 30 minutos la discrepancia en la hora de despertarse los días escolares y durante el fin de semana, indicaron los autores en Sleep.
"Pero este cambio fue pequeño y breve", dijo Gradisar.
Del total, 41 estudiantes participaron en cuatro clases de 50 minutos diseñadas para aumentar su conocimiento sobre las conductas de estilo de vida saludables, específicamente los buenos patrones de sueño.
Los otros 40 adolescentes, que asistían a otra escuela, recibieron la educación de salud estándar pero completaron los mismos cuestionarios que el primer grupo.
Al comienzo del estudio, el 53 por ciento de los estudiantes reportaron dormir poco los días de escuela (menos de ocho horas). Casi el 78 por ciento informó más de dos horas de diferencia en el horario en que se despertaban los días escolares y durante el fin de semana.
Otro 60 por ciento señaló que le llevaba más de 30 minutos quedarse dormido por las noches y un 35 por ciento indicó sentir somnolencia excesiva durante el día.
Después de completar la intervención, casi el 42 por ciento de los estudiantes dijo que valoraba dormir más y que ahora consideraba el sueño como algo tan importante como la dieta y el ejercicio para mantener un estilo de vida saludable.
"Nos encantó escuchar que los adolescentes decían que querían dormir más los días de escuela", manifestó Gradisar.
No obstante, dado que no necesariamente se prepararon para regularizar sus patrones de sueño para obtener un mayor descanso, el equipo de Gradisar planea evaluar cómo revisar la intervención para motivar a los estudiantes a mejorar su salud relacionada con el sueño en general.