El primer ministro japonés, Taro Aso, y los demás titulares de su Gabinete devolverán a las arcas públicas el 20 por ciento de la paga extra que reciben en verano, para contribuir a la recuperación económica del país, sumido en la recesión.
Según informó hoy la agencia local de noticias Kyodo, la paga extra de Aso tras la devolución será este verano de 4,38 millones de yenes (32.521 euros), mientras que cada uno de sus ministros recibirá 3,20 millones de yenes (23.759 euros).
Antes de alcanzarse este acuerdo en el seno del Ejecutivo japonés, se estaba considerando recortar las pagas extra en torno a un 10 por ciento, la mitad de lo que finalmente se ha decidido devolver al Estado.
También los viceministros y los secretarios parlamentarios planean devolver el 20 por ciento de su primera paga extra de 2009 para nutrir los fondos del Estado.
La economía japonesa, muy dependiente de la exportación y por tanto una de las grandes afectadas por la caída de la demanda global, se encuentra en recesión desde noviembre del año pasado.