LONDRES. Según un artículo publicado en la revista médica The Lancet, en los próximos años los incidentes médicos registrados en aviones en vuelo se volverán más frecuentes, especialmente debido a que los nuevos aparatos tienen mayor autonomía volarán sin escalas durante más horas.
Además de beneficios generados por las nuevas tecnologías aéreas se registrarán algunos inconvenientes. Así lo predice en un artículo publicado en la revista médica The Lancet, donde se explica que "en los próximos años los incidentes médicos registrados en aviones en vuelo se volverán cada vez más frecuentes".
¿Porqué? Básicamente debido a que los nuevos aparatos que están saliendo de las líneas de montaje -como el Airbus A380 y el Boeing 777- tendrán una mayor autonomía de vuelo y podrán extender sus viajes sin escalas por hasta 18 horas.
Así, un creciente número de viajeros aéreos, que sufren diversas condiciones médicas podría estar expuestos a sufrir más riesgos fisiológicos asociados a las condiciones de vuelo.
En el artículo escrito por el doctor Mark Gendreau, del Clínica Medical Center, de EE.UU- se recuerda que "cada vez viajan más pasajeros con condiciones cardíacas o circulatorias delicadas que pueden, o no, conocer".
Y destaca algunos ejemplos como un reciente estudio que mostró que el 18% de los pasajeros con enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC, la enfermedad que sufren cantantes como Sandro) tienen por lo menos una leve dificultad respiratoria durante un vuelo.
Los cambios naturales en la presión de la cabina pueden causar, en pasajeros saludables algunos calambres molestos en las piernas o una sensación de oídos tapados. Pero en otros casos pueden ser molestias graves, por ejemplo si la persona pasó por una cirugía reciente.
De hecho, se recomienda que tras una operación de cirugía mayor el paciente espere por lo menos- 14 días antes de volver a viajar en avión, algo que no todos conocen.
OTROS RIESGOS En general, los estudios científicos muestran una asociación entre los tromboembolismos venosos y los viajes aéreos de largo alcance. Y se muestra que esos viajes aumentan en hasta 4 veces los riesgos de desprendimientos de trombos en el sistema circulatorio. El máximo riesgo se registra en vuelos de más de ocho horas.
Ante esa situación, suele recomendarse a los pasajeros que traten de levantarse y caminar por la cabina del avión una vez cada 60 minutos, por ejemplo yendo al baño. También recomiendan mantenerse bien hidratados, reducir el consumo de alcohol y de cafeína, cambiar de posición y hacer ejercicios musculares y movimientos para mejorar la situación del sistema circulatorio durante el vuelo.
Por otra parte, hay médicos que recomiendan a algunos de sus pacientes cardíacos tomar una aspirina antes de viajar, aunque no hay todavía consenso generalizado sobre esta los beneficios de conducta precautoria
EL JET LAG
Otro problema común es el del Jet lag, o trastorno que sufre el cuerpo cambiar la sincronización de la hora del país que se visita con los "relojes biológicos" internos.
Eso suele generar para los viajeros una mayor dificultad a la hora de conciliar el sueño y una sensación de cansancio y somnolencia.
La resincronización toma varios días y hay algunos medicamentos como la melatonina que ayudan a prevenir, en parte, estas molestias.
Los estudios demuestran que los pasajeros que tienen mayor riesgo de sufrir algún incidente durante un vuelo son los mayores de 70 años.
El trabajo concluye analizando consideraciones futuras donde se denota que la calidad del aire de la cabina de vuelo será un tema clave en los próximos años.
Actualmente se ha vinculado el (mal) aire a algunas molestias relacionadas con sequedad en los ojos, congestión nasal, e irritación de la piel así como algunos dolores de cabeza, mareo y hasta confusión.
El informe finaliza concluyendo que "en la era de los viajes modernos, debemos tener un claro entendimiento de las posibles consecuencias médicas que pueden generar los largos vuelos comerciales".
"Las personas deben ser conscientes de las posibles complicaciones médicas de los viajes y sus médicos deben identificar y avisar a las personas de los riesgos potenciales y como es posible evitarlo- al de viajar largas horas en un avión".