Las emociones de las personas que componen una organización contribuyen a la estructura. De hecho, el liderazgo tiene mucho que ver con el manejo de emociones. Las organizaciones son lugares emocionales, y tanto estas como los negocios en general, utilizan las emociones para motivar el desempeño de los empleados.
Hay muchos hechos en las organizaciones que crean emociones y afectan la sensación de satisfacción o bienestar de los empleados. Nuestro sentido de identidad organizacional está conectado a la forma en que nos sentimos. Las emociones son esenciales para el liderazgo que inspira. Estas pueden afectar a los empleados en la forma en que reaccionan ante presiones y ser la causa de baja productividad y resultados.
Hoy gracias a modelos y técnicas de avanzada de cambio comportamental, las emociones negativas pueden ser reformuladas para convertirse en positivas.
Los humores y la emociones afectan nuestra selección y la calidad de nuestras acciones.
Las emociones son parte de nuestra existencia diaria y afectan nuestro cuerpo, el estado mental, el desempñeo, la salud y la energía.
Algunas investigaciones recientes sugieren que todas las decisiones están basadas en emociones y que esa lógica está usada para proveer una explicación racional por cualquier decisión que se tome.
Es importante distinguir entre emociones y humores. Las emociones son respuestas a hechos específicos mientras que los humores son emociones de largo tiempo como el pesimismo, el optimismo, la melancolía, el resentimiento y la ansiedad.
Se precisan habilidades en el manejo de las emociones para alcanzar un estado productivo óptimo.
En el lugar de trabajo dominado por el énfasis en lo racional y el pensamiento lógico, el rol de las emociones en la toma de decisiones y la ejecución a menudo ha sido menospreciado. Muchos mandos y líderes se han convertido en víctimas de sus emociones y depende sus humores y emociones "las cosas sólo suceden".
¿Cómo espera el management que sus empleados manejen sus emociones en el lugar de trabajo?
De acuerdo a unas últimas investigaciones, muchos empleados no quieren que sus compañeros expresen emociones fuertes ya sean negativas o positivas.
El manejo de las emociones no es algo que se enseñe en el trabajo. La mayoría de las organizaciones se han focalizado tradicionalmente en enseñar el pensamiento lógico y racional y han desestimado el aprendizaje emocional en sus programas de desarrollo. La mayoría de los empleados han aprendido a manejar sus emociones observando a los otros en el lugar de trabajo. De todas formas en los últimos años, muchos ejecutivos y coaches han incrementado el aprendizaje del manejo de emociones.
Estos coaches típicamente trabajan con líderes para a) ayudarlos a entender mejor el impacto de sus humores y emociones en su comportamiento, relaciones y desempeño. b) los proveen de técnicas y crear espacios emocionales productivos.
Algunos puntos que los coaches deberían considerar, a la hora de guiar a los otros en el manejo de emociones:
Cómo ayudar a los individuos a realizar un balance de los aspectos psíquicos, mentales y emocionales de su vida laboral y personal.
Características del bienestar emocional
Como ayudar a la gente a mantener una compostura emocional en el trabajo y maximizar sus relaciones interpersonales en el trabajo
Como ayudar a la gente a expresar mejor sus emociones a través de la asertvidad, y las habilidades comunicacionales
Como crear una energía positiva emocional
Como ayudar a la gente a controlar sus emociones negativas y alcanzar una interacción positiva en equipos o grupos
La conexión entre las emociones y el estrés en el lugar de trabajo
Entender los efectos fisiológios y psicológicos del estrés
Identificar aspectos del estilo de vida personal y laboral relacionados con el manejo emocional de una persona
Un mayor entendimiento de los sentimientos y del bienestar emocional
Autoconocimiento y que dispara las reacciones
Como identificar pensamientos, sentimientos y comportamientos
Como analizar patrones de comportamiento
Fuente: Behavioral Coaching Institute