El Secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, rechazó el jueves las medidas aprobadas por el Parlamento Europeo que criminalizan la inmigración y que deben afectar a millones de latinoamericanos indocumentados.
Bajo la nueva normativa, los inmigrantes ilegales podrán ser detenidos por hasta 18 meses y enfrentarían una prohibición de reingreso a la Unión Europea de hasta 5 años.
"Una vez más se aprueba en el mundo desarrollado una medida represiva en contra de los inmigrantes ilegales, que afecta directamente a muchos latinoamericanos", dijo el secretario de la Organización de Estados Americanos (OEA) en comunicado.
El funcionario agregó que es una "paradoja" que esos países negocien acuerdos comerciales y hablen de alianzas estratégicas cuando adoptan "medidas como la internación prolongada, que tratan como delincuentes a los inmigrantes ilegales, sin siquiera discutir ni negociar el tema con los gobiernos latinoamericanos".
Insulza agregó que el flujo migratorio hacia los países ricos seguirá mientras los latinoamericanos no encuentren trabajo en sus países, y dijo que el movimiento de personas es una de las consecuencias de la globalización.
"Mientras por una parte se insiste en el carácter positivo del proceso de globalización, se rehusa sacar las conclusiones que ese proceso produce en cuanto al movimiento de personas y se insiste en rechazar por razones políticas lo que se estimula a través de la globalización económica", dijo.
El secretario señaló que espera que sea posible entablar un "diálogo constructivo" con las autoridades europeas que evite la violación de los derechos humanos de los latinoamericanos.
Varios gobiernos de la región también rechazaron la medida europea que criminaliza la inmigración ilegal.