El perfil del desempleado catalán es un hombre de entre 30 y 44 años, que procede del sector de la construcción y tiene un nivel de formación bajo, según el informe anual del mercado de trabajo de UGT.
Seis de cada diez personas que se quedaron desempleadas en 2009 son hombres y cuatro de cada diez personas registradas en el paro a finales de ese año tienen entre 30 y 44 años. Además, más de tres de cada diez personas que se quedaron sin trabajo durante el año 2009 fueron inmigrantes.
La secretaria de Política Institucional de UGT de Cataluña, Neus Munté, ha explicado hoy que el año 2009 hubo una "brutal destrucción de puestos de trabajo" en Catalunya, más de 300.000, un 22% del total de la ocupación destruida en el conjunto del Estado.
Sin embargo, las cosas no van mucho mejor en lo que llevamos de año, ya que hay indicadores que incluso empeoran y estamos inmersos en una reforma "que no dará respuesta al déficit del mercado laboral".
Una cifra "preocupante" es que en el año 2009 el 19% de los desocupados no recibía ningún tipo de prestación y en junio de 2010 este porcentaje ya ha alcanzado el 21,2%, principalmente jóvenes y mayores de 45 años.
Cataluña cerró el año 2009 con 618.700 personas desocupadas, un 16,2% de la población activa y un 79% más que durante el mismo periodo del año anterior.
Munté ha considerado "preocupante" la baja cualificación de los desempleados, ya que ocho de cada diez sólo tienen nivel formativo de ESO.
Los más afectados por la crisis siguen siendo jóvenes, ya que la tasa de paro y de temporalidad casi dobla y triplica las tasas de la población total, y personas de más de 45 años, además de extranjeros.
Munté ha lamentado la eliminación de las escuelas taller, casas de oficios y talleres de ocupación y ha dicho que el proyecto de nuevas casas para nuevos oficios que se ha puesto en marcha es una "solución parcial" ya que, por sí solas, no dan salidas a los parados.
También cree que la incorporación de 150 nuevos orientadores laborales de la Generalitat llega cuando ya se ha doblado la tasa de paro.
Sobre la reforma laboral, UGT cree que no ataja ninguno de los problemas del mercado laboral, sino que facilita el despido y no generará más ocupación.
Además, esta reforma "abre todas las puertas" a la privatización de la intermediación laboral y, según Munté, en Cataluña ya hay 70 oficinas de trabajo y 110 empresas de trabajo temporal registradas.
En 2009, ocho de cada diez puestos de trabajo destruidos se han concentrado en la provincia de Barcelona, mientras que Girona registró la tasa más alta de paro de las demarcaciones catalanas, dos puntos porcentuales por encima de la media.
Lleida fue la demarcación que más contratación temporal registró, 88,2% y Tarragona la que más contratos indefinidos ha tenido, un 22%.
Durante el año 2009, Cataluña registró cerca de 4.000 Expedientes de Regulación de Empleo (ERE), con un total de 120.000 personas afectadas.