La sociedad de valores InterMoney espera que la economía española registre una tasa de parados del 10,1% de la población activa este año y se muestra mucho más pesimistas respecto al que viene ya que la sitúa en el 13,2%. Esta previsión es la más pesimista de todas las que contemplan las principales entidades y firmas de análisis nacionales.
De confirmarse la estimación de InterMoney, el paro alcanzaría en 2009 los niveles más altos desde el 13,42% que se registró en el último trimestre del año 2000. El paro subió en 246.600 personas en el primer trimestre del ejercicio actual, con lo que el número total de desempleados se situó en 2.174.200 y la tasa de paro repuntó más de un punto, hasta el 9,63%, alcanzando su valor más alto en tres años, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) hecha pública el pasado día 24 por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Diferencias
También se encuentran entre las más pesimistas de los 14 panelistas que forman el consenso económico de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas) las estimaciones de Analistas Financieros Internacionales (AFI), que sitúan la tasa de paro de la EPA en el 12% para 2009. En la misma línea se sitúan Caja Madrid y la Fundación Cajas de Ahorros (FUNCAS), que prevén tasa de parados del 11,5% y del 11,6%, respectivamente.
Entre los más optimistas respecto al mercado laboral español para los próximos años están el Instituto Flores de Lemus, que ve el paro en el 9,1% en 2009, y el Instituto Complutense de Análisis Económico y las Cámaras de Comercio, que lo colocan en el 10% y 10,2%, respectivamente.
En lo que sí parecen coincidir todos los panelistas de Funcas en que la situación del mercado laboral empeorará con el paso del tiempo y la tasa de paró subirá con fuerza en 2009.
La clave, el aumento de la población activa
José Carlos Díez, economista jefe de InterMoney, resta importancia a la diferencia que existe entre su previsión y la de las demás firmas de análisis. Explica que su tasa de paro es mayor en 2009 porque prevén un aumento de la población activa superior que el resto porque estiman que la llegada de inmigrantes seguirá siendo importante. Es decir, que al destruirse empleo en un mercado en el que el número de personas en edad de trabajar sigue aumentando, es inevitable la subida de la tasa de parados.
Pero al mismo tiempo, Díez quiere quitarle hierro a la tasa del 13,2% de paro que el estima. "No creo que veamos nada apocalíptico ni similar a lo que pasó en 1998", señala.
Las cifras del Observatorio permanente de la Inmigración hechas públicas ayer constatan que la entrada de inmigrantes sigue alta a pesar de la crisis económica. A 31 de marzo, había en España un total de 4.192.835 extranjeros en situación legal, lo que supone un aumento del 29,5% respecto a la misma fecha del año pasado.