Resumen de la problemática del Impuesto a las Ganancias

En la actualidad, el cálculo del impuesto a las ganancias sobre las rentas obtenidas por los empleados bajo relación de dependencia se realiza mensualmente sobre el salario de aquellos  trabajadores que percibían salarios brutos al 31/08/2013, por una suma superior a los 15.000$ brutos, o bien, quienes pasen a ser empleados a partir de dicha fecha e inicien su relación laboral con una suma salarial bruta superior a dicho monto.

En el año 2014 y bajo el supuesto de haber superado los parámetros mencionados en el párrafo anterior, todas la rentas obtenidas bajo relación de dependencia estuvieron alcanzadas por el gravamen, con excepción del medio aguinaldo del mes de  diciembre. Esto significa una porción ínfima, ya que partiendo de la base que el año calendario abarca 13 sueldos, en definitiva, 12 sueldos y medio, en 2014 fueron alcanzados por el impuesto a las ganancias.

La problemática principal se basa en dos puntos: el mínimo no imponible, la deducción especial y las demás deducciones personales no ha sido actualizadas con respecto al real incremento que ha mostrado la inflación y los tramos de las escalas sobre las cuales se determina la alícuota aplicable están congeladas desde el gobierno de Fernando de la Rúa (1999/2001).

En la actualidad, hay 4 mínimos no imponibles para calcular.

Los salarios menores a 15.000$ están exentos del pago del Impuesto a las Ganancias.

Por otra parte si entre Enero y Agosto del 2013, un empleado obtuvo sueldos brutos mensuales y habituales inferiores a 15.000$, pasó a encontrarse exento del impuesto. Si dicha suma se encontraba dentro del rango de entre 15.000$ y 25.000$, a modo estimativo, comenzó a tributar el impuesto sobre el excedente de 9020$ mensuales (estimación promedio sin contemplar cargas de familia). Y si superaba el importe de 25.000 $ pagaba el impuesto por el excedente de 7517$ mensuales (estimación promedio sin contemplar cargas de familia).

Los trabajadores autónomos tributan el Impuesto a las Ganancias sobre un mínimo no imponible de 1296$ por mes (estimación promedio sin contemplar cargas de familia).

Dado que las escalas salariales están congeladas hace 14 años, eso lleva a que aquel que queda incluido en el Impuesto a las Ganancias, no paga la alícuota más baja que es del 9% sino que empieza pagando alícuotas del 27% y si gana un poco más de 15.000$ ya paga alícuotas del 31% y hasta el 35% como si fuese un empleado con alto poder adquisitivo.

Una cosa es el valor del mínimo no imponible y otra la proyección de las escalas.

Se estima una inflación del 1100% desde el 2001 al 2014 por lo que  se deberían haber ajustado todas las bases imponibles de este impuesto como otros impuestos, (por ejemplo Bienes Personales) de acuerdo a la inflación. El Estado hubiese seguido recaudando el impuesto pero de acuerdo a una  estructura consistente y actualizada con el poder adquisitivo de las personas.

Al no haber realizado esa actualización, el Estado se queda con una porción extra de recaudación que no le corresponde y que genera una sensación de “confiscatoriedad” del dinero de los empleados.

Ejemplo:
Un soltero que gane en 2014 un salario de 16.000$ por mes, le habrían descontado 24.500$ durante el año.  O sea un sueldo y medio completo. En total le descontarán 22.000$.
En definitiva si este trabajador ha tenido un incremento salarial del 30% por paritarias en un contexto de inflación del 40%, tiene un poder de comprar aún más bajo que en 2013 pero pagará este año más impuestos que en 2013.
En 2015 si no se modifica la estructura del IIGG, con el 25 o 30% del aumento de paritarias, este empleado podría llegar a pagar en el año 2 salarios completos. Efectivamente con el aumento de paritarias, tendrá un aumento del impuesto.

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Horas extras
Si un trabajador que desgrava Ganancias, realiza horas extras, por ejemplo 1000$ al mes, de ese monto, 350$ van para el pago del IIGG.

Tanto el trabajador que gana 16.000$ como el que gana 100.000$ ambos están alcanzados por el 35% (el máximo) que descuenta el impuesto. Hoy se aplican directamente, tasas del 27%, 31% y 35% a los trabajadores, cuando deberían estar pagando una tasa del 9% por pertenecer a la escala más baja dentro de la estructura del impuesto. Se considera al trabajador de más de 15.000$ como un salario de los más elevados del país.
Se ha distorsionado un impuesto progresivo que se ha transformado en regresivo.

Existen muchísimos conflictos en la actualidad ya que hay gerentes que cobran menos que sus colaboradores por la quita del impuesto. Además de planteos, discusiones, malestar, clima laboral enrarecido, desmotivación y renuncias.

La renta financiera: las ganancias que se obtengan por los resultados obtenidos por la compra-venta de títulos valores o acciones que cotizan en la bolsa local.